lunes, 21 de marzo de 2011

GRUTA HELADA DE LECHERINES

El domingo lo dan bueno en el Pirineo y además el riesgo de aludes se ha estabilizado, asi que cambiamos las paredes y el bosque mediterráneo de la Horta de San Joan por la nieve y la alta montaña de los Pirineos; y los pies de gato y el magnesio del día anterior por las botas rígidas y los crampones. Hacía tiempo que mi padre y yo ibamos detrás de la Gruta Helada de Lecherines, destino elegido para esta nueva salida al monte.

La excursión de acceso a la cavidad es una ascensión de alta montaña en toda regla ya que a pesar de estar a unos 2000 metros de altitud, el desnivel a salvar entre Canfranc, punto de partida, y la cueva, es de 1000 metros por lo que nos pegaremos una buena pechugada.
El coche lo dejaremos en Canfranc pueblo y desde aquí tendremos que coger una cómoda senda que sube al Refugio de Gabardito. El inicio de la senda es muy cómodo y va por un bosque precioso.

En una 1h aproximada, nada más salgamos del bosque, llegaremos al Refugio de Gabardito, a unos 1500 metros de altitud. Ya podemos ver la nieve de las montañas que nos rodean y disfrutamos de un bonito paisaje primaveral en el que contrasta el verde los prados con la nieve de las montañas más altas.

Refugio de Gabardito


Paisaje primaveral de alta montaña de prados con las montañas nevadas al fondo


Desde el Refugio de Gabardito tenemos que seguir la GR11 para flanquear a media ladera un bosque muy incómodo en el que se pierde a ratos la senda. Esta zona, con más nieve o niebla, es muy perdedora.
Enseguida llegamos a unas cabañas de pastores y alcanzamos el punto de nieve continúa, la cuál no nos abandonará hasta la entrada de la cavidad. En es momento tendremos que dejar la GR 11 y desviarnos hacia un corredor muy evidente que hay en frente de las cabañas.


La nieve hace su aparición y no nos abandonará hasta la entrada de la cueva


Las laderas y el corredor de acceso a la cueva, zona muy expuesta a los aludes en invierno


Hemos tenido paciencia y hemos dejado que la nieve se estabilize después de las ultimas nevadas, las cuales han dejado el monte muy peligroso y el riesgo de aludes disparado. Este ultimo factor hay que tenerlo muy en cuenta a la hora de planificar la excursión, ya que la ruta va por una cara sur muy soleada y las laderas que hay encima de la cavidad están muy expuestas a las avalanchas, por no hablar del corredor que tendremos que subir para acceder a la misma.

Los Mallos Lecherines, habrá que venir a escalarlos algun día, no?



El inicio del corredor


La primera parte del corredor es muy empinada y salva bastante desnivel. En la parte superior se suaviza el desnivel hasta que el corredor se divide en dos ramales, nosotros tenemos que coger el ramal de la izquierda. Estamos cerca de la boca de la cavidad y ya encontramos signos en la roca que lo evidencian.


La boca es un porche de grandes dimensiones pero hasta que no se está enfrente de ella no se ve, ya que está en una pequeña vaguada. Desde arriba ya asoman las impresionantes formaciones heladas de las que vamos a disfrutar enseguida.


La boca de entrada de la cueva



La Gruta Helada de Lecherines es una de las cuevas heladas que se han localizado en los Pirineos, posiblemente la más famosa después de la Gruta de Casteret y una de las más grandes de la cordillera pirenaica. El fenómeno de las cuevas heladas de los Pirineos es muy singular y casi podríamos decir que único en el mundo, ya que estamos hablando de formaciones congeladas dentro de cavidades rocosas y no de cuevas de hielo propias de zonas glaciares y de otras zonas de alta montaña del planeta.
Parece ser que se forman por las corrientes de aire que circulan dentro de estas cavidades rocosas, las cuales favorecen la congelación del agua que se filtra por la roca. La formación de estas estructuras heladas, que en algunas de estas cavidades se conservan congeladas durante todo el año, depende mucho de las precipitaciones de la temperatura exterior. De hecho, el mejor momento para visitarlas es la primavera, en años húmedos y frios, ya que la filtración del agua del deshielo combinada con el frio favorece la formación de estas estructuras.

Para acceder a la cueva hay que bajar una rampa empinada que exige el uso de crampones. El porche de acceso es impresionante y lo más fotogénico de la cavidad, con estalactitas y cortinas de hielo de varios metros de altura. He colgado fotos de estas estructuras en las que salimos nosotros con el fin de que podáis apreciar las proporciones de las mismas.




Desde el porche de entrada accedemos a la sala interior. Aquí ya no entra la luz natural y es necesario el uso de luz artificial. En el fondo de sala, de mayores dimensiones de las que me pensaba, está ocupado por un pequeño lago congelado.


Las grandes dimensiones de la sala interior


Sobre el lago cuelgan del techo enormes estalactitas y colmillos de hielo de varios metros de altura. En la siguiente foto, tomada de lejos, podéis apreciar las dimensiones de las mismas. No os engañéis con la foto, esta tomada con varios segundos de exposición para captar la poca luz de la entrada, dando la sensación de que estaba iluminada esta zona de la cueva cuando en realidad estaba casi a oscuras.

Grandes estalactitas y chupones de hielo sobre el lago interior


Desde aquí descubrimos una galeria ascendente que por supuesto visitamos. Aquí las formaciones son más delicadas pero igual de bonitas que en la entrada. Al loro a la bandera de la siguiente foto, igualica que otras banderas que podemos ver en otras cuevas con la diferencia de que ésta es de hielo. ¿Cuántos años llevará esta formación en esta galeria?.

Espeleotemas helados



Formaciones de hielo delicadas en la galeria interior ascendente de la cavidad


Si alguno quiere visitar la Gruta Helada de Lecherines que sepa que en estos momentos está en su máximo esplendor. Y si os animáis a visitarla, no os olvidéis de vuestro equipo fotográfico, hasta los más malos serán capaces de sacar buenas fotografías.

7 comentarios:

Bruno dijo...

A principios de verano ya no queda rastro de hielo ni siquiera en la cavidad izquierda, es una cueva para ir en invierno.

RUBEN dijo...

Hola Bruno, pues ya sabes, si la quieres visitar ahora encontrarás mogollón de hielo.
Saludos

David Serrano dijo...

ostras! Que envidia me estas dando!

Esa tb la tengo en la lista de visitas pendientes. A ver si puedo subir pronto!

RUBEN dijo...

Hola David, lo que hubieras disfrutado tú haciendo fotos en esta cueva. A ver si coincidimos en una.
Saludos,

Eduardo Pardo dijo...

Tomo nota, y para marzo - Abril, iremos, porque hace tiempo que quiero visitarla, pero me daba un poco de yuyu por las avalanchas y porque por lo visto hay alguna sima cercana, saludos

RUBEN dijo...

Hola Eduardo, lo mejor para pillarla en pleno esplendor es que vayas en la primavera de un año generoso en precipitaciones, antes o después es dificil que la encuentres formada. El corredor de acceso a la cavidad es una zona simas (aquí se ubican algunas de las bocas del Sistema Lecherines) pero con cuidado no tendrás ningun problema. Respecto a las avalanchas tienes que tener en cuenta que es una cara sur (soleada) y que es un corredor (zona de canalización de aludes) por lo que después de grandes nevadas, sobretodo las tardías de primavera, puede ser delicado. Fuera de estos momentos concretos del año no tengas miedo en ir a visitarla.
Si necesitas más información, me avisas.
Saludos,

Eduardo Pardo dijo...

Lo tendré en cuenta, muchas gracias Ruben