lunes, 28 de marzo de 2016

EL PARQUE NATURAL DE LA ZONA VOLCÁNICA DE LA GARROTXA (GERONA).


LOS VOLCANES DE LOS PIRINEOS ORIENTALES


El Croscat, el volcán más grande la Península Ibérica.



Volcanes. Esa es la palabra que define este Parque Natural. Nada más y nada menos que unos 70 cráteres y conos volcánicos y unas 20 coladas basálticas. Es el paisaje volcánico mejor conservado de toda la Península Ibérica. Un vulcanismo latente pero no extinto. Las últimas erupciones tuvieron lugar en esta zona hace unos 10.000 años, que en términos geológicos, es apenas un suspiro, y la zona sigue teniendo gran actividad sísmica, a destacar los grandes terremotos de finales del S.XV que arrasaron completamente esta comarca.



Esta zona se ubica a los pies de los Pirineos, a unos 40 km desplazados hacia el sur de la dorsal pirenaica, y sin duda alguna la existencia de este vulcanismo está íntimamente ligada a la formación de esta cordillera, en la que chocan las placas continentales africana y europea. 

Volcán de Rocanegra.


Gedrera del Volcán de Rocanegra.





La principal área de concentración de conos volcánicos se ubica en la llanura de la población de Olot, capital política y administrativa de esta comarca y en dónde ubicamos nuestro campo base para visitar esta zona. Olot tiene una particularidad que la hace muy singular, ya que es la única ciudad de la Península Ibérica que tiene volcanes dentro de su casco urbano, tres en concreto. 



El Volcán de Puig Subiá.




El otro sector importante de concentración de conos volcánicos dentro del Parque Natural se ubica en el Valle del Río Ser, dónde se ubican los volcanes más conocidos: el Croscat y el Santa Margarida. Es la zona más turística y la que visita más gente.



Lava solidificada en medio del bosque.



En el borde del crater del Volcán de Santa Margarida.



En nuestras recientes vacaciones de Semana Santa por las estribaciones de los Pirineos Orientales, nos centramos principalmente en recorrer este Parque Natural, con la intención de visitar el mayor número posible de volcanes y de coladas basáltica. La excursión típica que hace todo el mundo es la que visita los volcanes del Croscat y del Santa Margarida pasando por la Fageda d´en Jordá, es una ruta muy dominguera, perfectamente señalizada y que cualquiera puede hacer sin problemas. A nosotros se nos antojó corta y decidimos ampliarla enlazando a nuestro antojo con el resto de rutas que iban a los volcanes cercanos, en ocasiones esos enlaces fueron circulares, en otras tocó ir y volver por el mismo sitio, pero no pasaba nada, no todos los días se visitan volcanes y no nos importaba estar todo el día pateando. Ampliamos la ruta hacia los volcanes de Rocanegra y Puig Subiá y el Volcán de Fontpobra. En total unos 22km y cerca de 700m de desnivel que nos tuvieron entretenidos casi todo el día.



El Volcán de Fontpobra.



Coladas de ceniza volcánica en el Volcán de Fontpobra.



Tal vez el volcán que más impresione sea el Croscat. Es el volcán más grande toda la Península Ibérica, su cono tiene 160 metros de altura. Y también es el volcán más jóven, la última vez que entró en erupción fue hace 11.000 años. Este volcán fue utilizado hasta hace muy poco como cantera, por lo que en una de sus caras hay una enorme cicatriz en forma de quesito, que por un lado es fea, pero que por el otro lado nos permite contemplar en la actualidad las entrañas del volcán. Aún se puede ver en la parte superior del corte la chimenea volcánica, aunque está a punto de colapsarse por la erosión actual.


 
Frente a la gedrera del Croscat.

 
Coladas de lava y ceniza volcánica del Croscat, una maravilla de sitio.



El paisaje es singular y sorprendente, son unos Pirineos diferentes, muy diferentes, aquí los valles y las altas montañas son sustituidos por los volcanes y las coladas basálticas que escupieron desde sus cráteres. 

Paisaje volcánico a los pies del Croscat, aunque no lo parezca, estos son los Pirineos.



Como he comentado antes, la ciudad de Olot es la única localidad de la Península Ibérica que tiene volcanes dentro de su casco urbano. La mayoria de la gente se queda en la zona del Croscat y del Santa Margarida pero se olvida de visitar los volcanes de esta ciudad. A nosotros no se nos escaparon, la verdad es que nos resultaba muy curioso este sitio.


Los volcanes urbanos de la localidad de Olot: el cráter del Volcán de Montsacopa.



Los volcanes urbanos de la localidad de Olot: el Volcán de la Garrinada.


Los volcanes urbanos de la localidad de Olot: el Volcán de Montolivet.



Esta zona no sólo nos sorprendió por los volcanes. Nos llamó mucho la atención lo verde que era, y la enorme masa forestal que atesora. Desplazada unos 40 km al sur de la cordillera pirenaica, a escasos 700 metros altitud y muy cerca del Mediterráneo, lo normal es que fuera una zona más bien seca. Pero la escasa altitud favorece la concetración de nieblas en los momentos de inversión térmica y la propia geografía de la comarca favorece que los conos volcánicos agarren la humedad procedente del cercano Mediterráneo. A esto hay que sumar que los suelos son extremadamente fértiles por las cenizas y lavas volcánicas. Todo esto favorece el desarrollo de densos bosques que ocultan completamente las laderas de los volcanes, a destacar la Fageda d´en Jorda, considerado como uno de los mejores bosques de hayas de los Pirineos y ubicado en una latitud muy meriodional, cuya existencia sería imposible en condiciones normales; de hecho, este bosque se levanta sobre la colada del lava que escupió el Croscat en su última erupción. En ciertos momentos, me recordó esta zona a los Pirineos Atlánticos por lo verde que era.



La Fageda d´en Jordá, un hayedo único en la cara sur de los Pirineos que se ubica sobre la colada de lava que hay a los pies del Croscat.



Fuera de esta zona podemos visitar más sectores con evidencias de vulcanismo. Castefollit de la Roca es uno de los más curiosos, un pueblo medieval construido sobre la proa de una enorme colada basáltica y que no os tenéis que perder si os acercáis por esta zona.

La colada basáltica de Castefollit de la Roca.


Es increible la gran diversidad de paisajes de la cordillera pirenaica, tanto en su vertiente norte o vertiente sur como en ambos extremos de los Pirineos. Los volcanes del Parque Natural de la Garrotxa es magnífico ejemplo de esta diversidad. Si no lo conocéis y tenéis curiosidad por ver unos Pirineos diferentes, no dudéis en acercaros hasta aquí, sin duda alguna, el viaje merece la pena.

viernes, 18 de marzo de 2016

MI PRIMERA ULTRA DE MAS DE 100 KM.

ULTRA LES FONTS: UNA CARRERA POR ETAPAS.


El equipo al completo posando con el chaleco de finishers de la carrera.



Llegaba yo a finales de año con un pico de forma muy alto y me apetecía subir algo más el listón y probar cosas nuevas. Para ello, fijé como objetivo ULTRA LES FONTS, una carrerica de 120km y 6.000 metros de desnivel que se corre por las montañas del Parque Natural de Els Ports (Cataluña). Con esta carrera  brincaría por primera vez de la mítica barrera de los 100km y probaría cosas nuevas ya que es una ultra que se corre en etapas en 3 días, algo que no había hecho nunca.




Perfil de las 3 etapas.


Desde finales de diciembre empecé  la preparación específica para la carrera, pero las Navidades un fuerte resfriado me apartó de los ruedos una semana y me dejó otra semana más bajo mínimos. Tras recuperarme empecé a forzar la máquina en los entrenos y en el camino me hice un destrozo en el pie derecho, que por suerte no fue mucho, pero que me volvió a dejar fuera de los ruedos durante 2 semanas. La cura a la lesión era reposo absoluto, algo inviable a escasos 2 meses de la carrera. Decidí parar, pero no del todo:  andar rápido, subir y bajar escaleras en Juslibol para acumular desniveles, y trotar un poco;  en definitiva un juego peligroso en una línea muy fina que me permitía seguir avanzando con los entrenamientos pero que en cualquier momento, si cometía un error, me podía dejar en el dique seco y apartarme definitivamente de la carrera.
Pero supe jugar con inteligencia,conseguí recuperarme y me presenté en el mes de febrero con el tiempo justo para hacer los entrenos claves para Ultra les Fonts. Las tiradas largas  por la Sierra de Guara ya las conocéis, las he reseñado en el blog y las hice aprovechando los días sueltos de vacaciones que me quedaban del año pasado. A las calcetinadas de la Sierra de Guara, le sumé más tiradas largas por Zaragoza, 2 en las Planas y algun que otro entreno severo con los amigos por los montes de Juslibol y Alfocea. Los entrenos fueron duros, muchos kilómetros y mucho desnivel acumulados en un mes y medio, hubo días que disfruté mucho, pero otros en los que acumulé mucho cansancio y pasé mucho frio. Las Ultras de estas características se hacen en este tipo de entrenos.


Al loro con la pelota de tenis que tenía en mi tobillo a finales del mes de enero.



Esta es una Ultra que me ha hecho mucha ilusión que no todos los días se superan por primera vez los100km en una carrera. Voy a hacer una reseña resumida de lo que dio de sí Ultra les Fonts:

*DÍA 1. LA NOCTURNETA. 23KM Y 300D+.

El viernes lo pillo de vacaciones y por la mañana marchamos hacia Xerta, dónde está el campo base de la carrera. Esta vez voy en equipo, nos juntamos Victor, Antonio y yo de Zaragoza y allí nos juntariamos con Raul procedente de Jaca y su colega Fernando de Madrid.

El equipo en la salida de la Nocturneta.


La primera etapa sale a las 21:00h y se corre totalmente de noche a la luz de nuestras frontales. El recorrido es un auténtico truño, el desnivel apenas se nota y se puede volar literalmente por el circuito. Este día hay que correr con la cabeza y con el freno de mano echado ya que los dos días siguientes van a ser muy largos. Picamos meta en 2h28min, en condiciones normales habría bajado de las 2h y sin esforzarme mucho, el miedo se nota en las caras, a ver quién es el guapo que le mete cera a las zapatillas. No somos concientes, pero el desgaste ha empezado.
Nos duchamos, cenamos en el pabellón con el resto de los corredores y al saco. Son cerca de las 01:30 cuando nos vamos a sobar.



*DIA 2: TRAIL DE LES FONTS. 70KM Y 4.000 D+.

04:30h de la mañana. Se toca diana. A fuera de es noche cerrada, la misma noche que hemos despedido hace apenas 3 horas. Con la actividad de la reciente jornada, apenas he dormido. Toca cambiarse, prepararamos con meticulosidad todo lo que vamos a llevar y marchamos al pabellón a desayunar y a pasar el control de la organización.



Hoy es la etapa más larga y complicada del fin de semana. A pesar del sueño, llevamos alegría en el cuerpo, el equipo transmite optimismo, a pesar del cansancio y del agotamiento no perdimos la sonrisa ni un sólo momento. Esta es la clave de las Ultras, el optimismo, pase lo que pase no hay que perderlo nunca.  La mañana es fresca,  hace viento y arriba, en las crestas, sabemos que pasaremos frio, pero bueno, quién dijo que esto iba a ser fácil.

El equipo en la salida del Trail de les Fonts.



Los primeros 10km, hasta el primer avituallamiento, los hacemos prácticamente de noche y vuelven a ser un truño. Pasamos por la famosa acequia, ojito con este paso, vale que te pilla fresco, pero hay que ponerse las pilas y no cometer ni un error, en algunos puntos el galletón que te puedas dar es de los buenos.



A partir del primer pueblo, dónde está el primer avituallamiento, dejamos la puñetera acequia, las pistas de tierra y el asfalto, y nos sumergimos de lleno en las montañas del Parque Natural de Els Ports. Esto sí, es lo que venía buscando, ahora toca disfrutar del esfuerzo mientras recorremos ambas vertientes del parque natural.
Estas montañas no son muy altas, apenas 1200 metros de altitud en sus cotas máximas, pero partimos casi desde el nivel del mal asi que ya os podéis imaginar las cifras de los desniveles que tenemos que afrontar.




Las "barritas energéticas" que teníamos en los avituallamientos, me puse tibio.



La etapa tiene 4 grandes dientes de sierra que se traducen en 4 empentones hacia arriba, a destacar el segundo por lo salvaje de su desnivel. Y como bien sabemos, todo lo que sube, tiene que bajar, asi que las 4 grandes subidas van seguidas de 4 descensos pronunciados. Ay amigos los descensos, para mi fueron la clave de ese día, el terreno era muy técnico, predregoso y muy suelto, bajar por aquí tenía su miga, y el nivel de esfuerzo era casi mayor que el que desarrollabamos en las subidas. A destacar el tercer descenso, con el pueblo de Alfara en el fondo del valle, técnico, interminable y peligroso, veías el pueblo abajo, seguias bajando, y bajando, pero no llegabas nunca.

El paisaje por el que discurre la carrera es brutal.



Arriba, en las crestas, el fuerte viento desplomó las temperaturas asi que hubo que lidar también con el frio en las partes altas y el contraste con el calor en las partes bajas del circuito. Esto endureció aún más la jornada.



La etapa es de una belleza indescriptible. Atravesamos un sinfin de montañas escarpadas, crestas, collados, valles, con vistas del Delta del Ebro y de la cercana costa mediterránea desde las  partes altas del circuito. Una pasada.




Fuimos todo el rato juntos, pero al final, después del último gran avituallamiento, el equipo se disgrega. Son muchas horas y mucho el cansancio acumulado, empieza "el sálvase quién pueda", es el momento en el que cada uno hace su carrera y sufre su penitencia particular.
Al final, consigo cruzar el arco de meta de la mano de Antonio con una crono un poco por debajo de las 13h. Buf, qué día más duro, pero lo hemos conseguido.
A ducharse, a cenar de nuevo en el pabellón, y a dormir pronto, que mañana es día de escuela.

Extenuados pero muy contentos en nuestra llegada a la meta del Trail de les Fonts.



*DIA 3: CURSA DE LES FONTS: 27KM Y 1.700 D+.


Suena el despertador a las 06:30 de la mañana. Curiosa la sensanción de tener que levantarte del saco con el cuerpo machacado del día anterior, sabiendo que te espera por delante una dura etapa de montaña que se te va a llevar por delante las pocas fuerzas que te quedan, si es que te queda alguna.
No me levanto con malas sensaciones y mis compañeros tampoco. Desayunamos, pasamos el control de la salida y otra vez al turrón. Hoy es el día clave de  Ultra les Fonts, el día en el que te vas a tener que superar, en el que vas a luchar contra el cansancio y en el que vas a comprobar si los entrenos que llevas en las piernas te van a servir o no para ser finisher.

El equipo en la salida de la Cursa de les Fonts, se notan las caras de cansancio.



Dan el pistoletazo de salida y sorprendentemente puedo correr, no con mucha alegría, pero corro. Subidón por que ni en mis mejores previsiones pensaba que iba a estar tan bien ese día. Los primeros kilómetros son muy corribles y esto no es bueno para mis piernas, no hago más que mirar hacia arriba, necesito que empiecen ya las cuestas para empezar a andar.


A pleno rendimiento en la subida de la Coscollosa, con más de 100km en las piernas.


Hoy, de  nuevo cada uno del equipo hace su etapa. Yo quiero ir a mi ritmo, encender el motor diesel y poner la marcha corta al tractor para superar, sin prisa pero sin pausa, las diferentes etapas de la jornada.
La jornada de hoy es preciosa. Subimos a la cima de la Coscollosa, con unas vistas de escándalo de la costa mediterránea desde allá arriba. Es el km15. y sé que si supero este paso ya tendré Ultra les Fonts en el bolsillo.
Los últimos 7,5km fueron especiales para mi. Ya sabía que iba a acabar y, aunque estaba reventado, decidí hacerlos corriendo a un ritmo muy intenso, en torno a los 4:30-4:40/km ya que era un terreno favorable, increible que consuiera ir asi con 115km y 6.000m d+ en las piernas. Llevaba subidón en el cuerpo, las piernas pedían candela y había que aprovechar la inercia del momento. Debí adelantar en este tramo a cerca de 20 corredores
Crucé la meta casi esprintando con una crono de 4h18min, había conseguido ser Finisher de Ultra Les Fonts junto con mis compañeros de Zaragoza, un 10 para todo el equipo y mi más sincera enhorabuena.




¿Qué es Ultra le Fonts?. Esta carrera es mucho más que una Ultra, es una carrera por etapas, diferente a lo que estamos acostumbrados a hacer, un fin de semana de convivencia con gente con la que compartes tus mismas aficiones de correr por la montaña. Es una carrera dónde los organizadores cuidan hasta el más mínimo detalle para que los corredores estén lo más cómodos posibles y en donde  se palpa la hospitalidad de la gente de los pueblos por dónde pasa el circuito. No te falta de nada y todo ello a un precio asequible y relativamente cerca de casa. Y los paisajes son una pasada, un escenario perfecto para correr por la montaña.
Si no la conocéis y os apetece probar cosas nuevas, no dudéis en venir. Eso sí, venid preparados, es una carrera dura, de mucho desgaste y que exige planificación e inteligencia. Y los tiempos de corte no irán sobrados si no vais fuertes en las cuestas.
Seguro que volveremos.


Foto de grupo de todos los finishers de Ultra les Fonts.