TRAVESÍA VADIELLO-NOCITO POR CUELLO BUIL-EL MESON Y LA ERMITA DE SESCUN Y RETORNO POR LA SENDA DE LOS CARBONEROS (TRAIL RUNNING).
Desde siempre la Sierra de Guara ha sido un obstáculo natural a salvar entre el Pirineo Central y la Hoya de Huesca/Valle del Ebro. Actualmente la principal vía de comunición se hace por Monrepós a través de la Sierra de Bonés. Pero antaño, y hasta hace no mucho (años 30 del S.XX), la principal ruta de comunicación entre el Pirineo Central y la Hoya de Huesca pasaba por la Guarguera y el Valle de Nocito.
Desde Nocito la ruta atravesaba la Sierra de Guara siguiendo el Valle del Guatizalema, comunicando la capital del valle con la localidad de Santa Eulalia la Mayor a través de Cuello Buil, que era el puerto homónimo del Monrepós hasta que éste fue abierto al tráfico carretero. Por esta histórica ruta de comunicación se comunicaba el Pirineo Central con la Hoya de Huesca y era utilizada para el transporte de vino y aceite desde el Somontano hasta los valles pirenaicos.
El objetivo de este post es mostrar una ruta circular Vadiello-Nocito-Vadiello que realicé recientemente siguiendo esta histórica ruta.
Vadiello, mi punto de partida.
Desde el sur, el punto de partida original sería la localidad de Santa Eulalia la Mayor, una pintoresca población que en su parte alta alberga los restos de un castillo con una torre óptica recientemente recuperada. Esta localidad domina la entrada del Valle del Guatizalema. Ahora que sabemos la enorme importancia de esta vía de comunicación en el pasado, es fácil de comprender el por qué de la ubicación de esta forticación, que en la Edad Media marcaba el límite entre el mundo islámico (al sur) y el mundo cristiano (al norte). Estaba claro que este paso de montaña era la puerta que abría el paso a las invasiones desde el sur, por eso había que defenderla.
La atalaya y torre óptica de Santa Eulalia la Mayor vista desde el cauce del Guatizalema Inferior.
Yo voy a pata, bueno corriendo, y la circular saldría muy larga si saliese desde aquí, asi que conduzco hasta Vadiello y dejo el coche en el parking de la Canal del Palomo. Retrocedo hasta el Refugio de Peña Guara y tomo la pista que lleva directamente hasta el Collado de Sarramina.
La pista es ascendente y sube un desnivel constante, asi que primer calentón del día, pero no importa, he salido del coche a -2º y asi entraré en calor.
Las vistas desde esta pista son antológicas. Abajo el Valle del Isarre con su bosque de pinos de repoblación y los restos del poblado antiguo junto a la enorme surgencia. Este poblado estaría íntimamente relacionado con la ruta que vamos a seguir. En frente los Mallos de Aliana y Ligüerri y los enormes paredones de conglomerado surcados de grietas verticales por las que se han abierto paso los famosos barrancos de Vadiello.
El Valle del Isarre, su bosque de repoblación y los barrancos verticales de conglomerado de Vadiello.
En el Collado de Sarramina interceptamos la pista que viene de Santa Eulalia la Mayor, ya estamos en la Ruta del Aceite y del Vino, toca girar a la derecha en dirección a Cuello Buil.
Más adelante, en otro cruce de pistas, podremos contemplar en su extensión la ruta que sube hasta Cuello Buil, paso clave en la travesía que voy a hacer hoy.
Chino-chano y por pista forestal consigo llegar prácticamente corriendo hasta Cuello Buil........ya se me ha ido el frio, no sé por qué......ja,ja,ja. En Cuello Buil me lio la manta a la cabeza y como el entreno de hoy no va a ser lo suficientemente largo ni va a tener el suficiente desnivel, pues decido subir al Matapaños...........total ya que estoy al lado........
Viva el barro, a por el Matapaños!!!!!!!.
Es la vía normal que sube al Matapaños y tiene cosas interesantes. Un poco por encima de la pista forestal encontraremos los restos de 2 neveras. El pasado se utilizaban para acumular la nieve del invierno y servían para abastecer de nieve y hielo a las poblaciones cercanas. La Sierra de Guara está plagada de neveras pero por esta zona no abundan, supongo que la cercanía de la vía de comunicación que estoy siguiendo explicaría su existencia.
Pozos de nieve del Matapaños.
A partir de las neveras el camino se pone tieso y entro en territorio erizón. Cuando se acaba la costera aún hay que andar un trozo más hasta la cima. Hacía tiempo que no subía por aquí, antes era un trazado difuso en medio de los erizones, ahora hay una trocha perfectamente marcada....asi que a trotar de nuevo.
Tras superar la fuerte costera, entramos en territorio erizón. Aun queda un ratico hasta la cumbre.
En poco rato alcanzo la cima del Matapaños. Es la tercera vez que estoy aquí, como al sol se está muy bien y el día va a ser muy largo, aprovecho para avituallarme a conciencia y a beber a saco.
Cumbre del Pico Matapaños (1.532m).
Las vistas son muy extensas. En la siguiente foto podéis ver el enorme poljé de los Campos de Ciano, es la zona de absorción que alimenta los manantiales de San Julián de Banzo.
El gran poljé de los Campos de Ciano.
Y hacia el norte el Tozal de Guara, el Fragineto, el Valle del Guatizalema y los montes y barrancos que recorreré a continuación.
Se está muy bien aquí arriba pero toca bajar de nuevo a Cuello Buil. A partir de aquí, "terra incognita" para mi. Se multiplican las distancias y también los esfuerzos, asi que paso a paso y cubrir las etapas del camino.
La ruta es clara, hay que seguir la larga pista forestal que cae en picado hacia el norte. En un primer cruce de pistas encontraremos el único cartel de esta zona de la excursión que señala el Mesón de Sescún, punto al que me dirijo.
En el siguiente cruce de pistas que encontremos tomaremos la pista de la izquierda. La de la derecha lleva al Barranco de la Matosa y a a las ruinas del despoblado homónimo; después baja por trazas de senda (al menos es lo que dice mi plano de Alpina) hasta el Guatizalema......uhhh, esta ruta promete........y seguro que está bien defendida por la vegetación lacerante de Guara!!!!!!!!.
Acojonantes las vistas que hay del Borón, una perspectiva muy diferente de la que tenía hasta ahora de esta montaña.
Vistas inusuales del Pico Borón.
Hay un cruce de pistas más tras atravesar un pequeño barranco. Nosotros por la principal, la otra sube al Collado de Luna y por ende al Gabardiella. Esto sí que es muy interesante, abre las puertas de una posible ruta circular que rodee el Gabardiella y que comunique el Valle de Flumén con el Guatizalema.........ahí lo dejo caer!!!!.
La interminable pista por fin llega al Mesón de Sescún, no se ve hasta que has llegado a él. Las ruinas de esta construcción sorprenden por la enorme distancia a la que se encuentran de los núcleos de población más cercanos (Nocito por el norte y Santa Eulalia la Mayor por el sur). Antaño estos mesones hacían las funciones de los hostales y los hoteles de carretera actuales, este mesón era un punto neurálgico en la ruta del vino y del aceite que estoy intentando seguir, sin duda alguna tuvo que dar refugio a los numerosos caminantes y arrieros que pasaron por este camino. La importancia de esta construcción tuvo que ser significativa en el camino que comunicaba el Pireno Central con la Hoya de Huesca, asi que, si por algún casual llegáis hasta aquí, perdáis el debido tiempo en contemplar estas ruinas.
El Mesón de Sescún.
En este punto, hago un inciso en mi ruta y me desvío de nuevo, total, como apenas llevo kilómetros en las piernas, no vaya a ser de nuevo que el entreno salga corto......ja,ja,ja. Pero es que esta oportunidad no podía desaprovecharla y no todos los días se llega hasta aquí. Me estoy refiriendo de la Ermita de Sescún. En el Mesón hay un cartel que lo señaliza y el camino está limpio y completamente marcado.
La subidica a la ermita ya pesa en las piernas pero tengo muchas ganas de visitar este sitio. El cartel señalizador pone que se sube en 50min pero a la marchica yo lo hice en 25min. Esta ermita está en "casa-dios", es uno de los lugares habitados más aislados y recónditos en la montaña que he visitado hasta ahora. Se encuentra a unos 1.200m de altitud (casi la misma altura que Benasque), casi mimetizada por el paisaje.
La ermita de Sescún mimetizada en la montaña.
La ermita formaba parte de un poblado constituido por apenas 5 casas que se levantó aquí en la Alta Edad Media. Increible que la gente viviese en este sitio, aislamiento total y absoluto, aunque muy cercano a la gran ruta que comunicaba el Pirineo con el Valle del Ebro. Suponto que las circunstancias históricas del momento, con los musulmanes acechando por el sur, hizo que se tuviesen que ir a vivir a este sitio tan aislado.
La Ermita de Sescún, o sus restos, es una pasada. La más meriodional del denominado conjunto de las iglesias del Serrablo, aunque fuera de su ámbito geográfico, datable con total seguridad hacia el año 1.000. La leyenda dice que fue fundada por monjes del cercano-no tanto- Monasterio de San Martín de la Val d´Onsera. En todo caso, el poblado medieval duró poco tiempo y quedó la ermita como centro espiritual de los poblados de la zona (Isarre, Matosa....etc), hasta que poco a poco, conforme se despoblaba la zona, fue cayendo en ruinas y sus tallas de madera llevadas a Santa Eulalia la Mayor, de la que dependía esta ermita, aunque está más cerca, geográficamente hablando, de Nocito. El templo fue invadido por la vegetación y permaneció oculto a los hombres por el olvido, hasta que una "expedición" de búsqueda llevada por miembros de Peña Guara en el año 1974 consiguió localizarla.
Pude disfrutar de este sitio entre semana, en total soledad, qué pasada, sin duda alguna fue lo que más me gustó de la ruta realizada ese día.
Vuelta al Mesón de Sescún por el mismo sitio y a continuar la larga Ruta del Vino y del Aceite hacia Nocito. En el Mesón de Sescún acaba la pista forestal y tendremos que seguir por senda hasta Nocito. Una primera subida nos llevará hasta Cuello Salillas, desde dónde veremos por última vez el Mesón y la larga ruta recorrida hasta ahora.
Cuello Salillas (al fondo el Mesón de Sescún y más al fondo Cuello Buil, de dónde procedo).
A partir de aquí se me hizo muy largo. Pensaba que era todo descendente, pero la senda tenía continuas subidas, no muy duras, pero subidas, para salvar los numerosos barrancos que atraviesa. Poco a poco me voy acercando a las inmediaciones del Dolmén del Palomar, por fin terreno conocido!!!. La ruta está perfectamente marcada pero este dolmen no y pasa completamente desapercibido si no lo conoces. Es la tercera vez que lo visito y su ubicación cerca de esta importante ruta, tal vez sirva para explicar por qué se levantó aquí, por lo visto, esta vía de comunicación fue recorrida desde tiempos muy antiguos.
Dolmen del Palomar.
En el Dolmen del Palomar abandono la ruta a Nocito, os recuerdo que vengo de Vadiello y llevo un porrón de kilometros y metros de desnivel en las piernas. Es hora de volver al punto de partida y lo voy a hacer por la Senda de los Carboneros, recorrida por mi recientemente a finales de diciembre.
Frente la ruta que iba por el Mesón de Sescún y Cuello Buil, digamos que la Senda de los Carboneros era la ruta montañera que comunicaba Nocito con Vadiello y por ende con Santa Eulalia la Mayor, pero más accidentada y compleja de seguir y exigía hacer numerosos vadeos por el río Guatizalema, por eso se recorría menos. Lleva este nombre por que parte de esta senda discurre por los bosques de las Canales del Fragineto, utilizados antaño por los carboneros para extraer leña.
A por la Senda de los Carboneros!!!!!!!.
El río Guatizalema lleva más agua que la otra vez pero sigue en niveles muy bajos. El primer vadeo lo hago sin problemas sin mojarme.
La ruta de retorno es larga de nuevo y un auténtica montaña rusa, con numerosas subidas y bajadas para salvar los puntos más complicados del valle y alejarse del río en los puntos claves.........solo que las piernas ya van cansadas y estas subidas ya me están haciendo mella. Por lo menos estoy disfrutando de esta preciosa senda con otra perspectiva, la otra vez la hice en sentido contrario.
Valle del Guatizalema.
El segundo vadeo, a la altura del Proyectil, es más problemático y lo salvo haciendo funambulismos de piedra en piedra mojándome tan sólo la punta de las zapatillas.
El Proyectil, faro de esta ruta, se alza sobre mis cabezas de forma desafiante. ¿Se habrá escalado esta aguja?.
El Proyectil visto desde abajo.
La siguiente subida, por la enorme y empinada pedrera, se me hace más dura de lo normal, llevo mucha fatiga en las piernas, pero que bien me está viniendo esto para entrenar las largas distancias. Esta subida permite salvar al nivel de la cola del Embalse de Vadiello, que ya he alcanzado. Las vistas desde el collado superior son preciosas, y permiten contemplar en toda su extensión el largo camino de retorno que estoy realizando a través del Valle del Guatizalema.
Solo por estas vistas merece la pena la paliza que me estoy pegando.
Enseguida llego a la altura del Huevo de San Cosme, otro faro de la ruta que me indica que ya estoy cerca de Vadiello.
Frente al Huevo de San Cosme.
Y tras pasar la presa de Vadiello y llegar al Parking de la Canal del Palomo doy por finalizada esta larga ruta. Hoy me he ganado la jarra de cerveza.
Por fin estoy en Vadiello!!!!.
Día largo y paliza severa, el móvil registró 43km y cerca de 2.300m de desnivel positivo..........bla,bla,bla,......sólo son cifras y números que son secundarios y no me dicen nada. Lo importante fueron las sensaciones (algunos ya sabéis que estoy lesionado del pie derecho) y lo que pude disfrutar de esta preciosa ruta histórica. Hagáis lo que hagáis, no os olvidéis nunca de disfrutar cuando vayais al monte. La guinda de esta ruta la puso el poder conocer parajes nuevos de la Sierra de Guara y además se abrieron posibilidades de nuevas rutas.
La próxima vez más y mejor!!!!!!!!!.