COMO SOBREVIVIR AL ATAQUE DE 3 MASTINES PIRENAICOS.
Lago de Lurien y Lago de Fabreges, ruta seguida de ascenso, de ahí abajo vengo, menuda subidica que tiene este pico!!!!.
*PRESENTACIÓN: El Pic de Lurien se ubica el Valle d´Osseau, delimitando por el norte los Lagos de Artouste. Es una montaña muy conocida por los franceses pero no tanto por los pirineistas del lado español. En verano y por sus rutas normales, es fácil encontrarse a grupos de montañeros que suben a su cumbre ya que es una montaña relativamente concurrida.
Se puede acceder de forma más sencilla y un tanto dominguera desde los propios Lagos de Artouste utilizando en verano el famoso trenecito y el telecabina de la estación de ski pero esto, evidentemente, le quita mucho encanto a la actividad.
La otra opción es subir directamente desde el parking que está justo a la entrada de la estación de ski de Artouste por una senda perfectamente marcada que, primero por bosque, luego por pastizales de alta montaña hasta el Lago Lurien, y por último, a través de una dura y empinada pedrera, nos depositará en la cumbre en unas 3h30-4h, según las piernas que llevemos. Esta opción es la más atractiva y montañera, y también la más dura, unos 1.600m d+ que se salvan de forma salvaje, sobretodo en el primer tramo de bosque y en la pedrera final que nos lleva a la cumbre.
Bonitas vistas del Midi d´Osseau en el ascenso.
Corto tramo de valle en el que el ascenso te da un poco de tregua y te permite relajar algo las piernas.
Barrancón en la base del Lago Lurien, interesante como refugio de emergencia.
El Lago Lurien lo encontraremos más o menos en la mitad de la ruta, un buen sitio para darse un respiro antes de la última subida final.
*Y QUÉ SE ME HABÍA PERDIDO A MI EN ESTA MONTAÑA?.
En primer lugar, que todavía no había subido a esta cumbre y tenía muy
buenas referencias de esta montaña, no pilla lejos de Zaragoza y es una
actividad ideal para hacerla en el día en el periodo estival.Y es que
hay vida más allá del círculo de montañas que rodean la cabecera del
Portalet, es soprendente la masificación que tienen estas montañas
cuando, unos pocos kilómetros más abajo, se pueden hacer otras
ascensiones y rutas más bonitas y sobretodo mucho más tranquilas.
En
segundo lugar, quería hacer un entreno de calidad y un test de esfuerzo
para la cercana e inminente Puyada a Oturia, una carrera de montaña que
tenía a mediados de septiembre. Esta ascensión cumplía los requisitos
que estaba buscando: una ascensión con fuerte desnivel dónde poner a
prueba mis piernas y comprobar si las actividades de montaña recientes y
los últimos entrenos habían surtido su efecto; y además, me llevaría al
zurrón una cumbre que todavía no había pisado.
Vistas del Pico Lurien desde el lago homónimo y trazado aproximado de la ruta de ascenso, los últimos 500m d+ se suben a cuchillo!!!!.
El Collado de Lurien justo antes de acometer la última y empinada pedrera de ascenso.
Vistas de la empinada senda de ascenso que discurre por la pedrera final de la pirámide cimera del Pic Lurien.
*LOS ÚLTIMOS ENTRENOS HAN DADO RESULTADOS POSITIVOS. Pues sí, la temporada de montaña de verano y los entrenos de las últimas semanas han servido para recuperar sensaciones perdidas tras las lesiones de mediados de mayo. Sí, esta ascensión es severa, con tramos de fuerte desnivel tanto al principio en el tramo de bosque, como al final en la pedrera que precede a la cumbre, pero era justo lo que venía buscando.
La ascensión la hice a fuego, aunque sin exprimirme del todo que para eso es un entrenamiento, con un par de paradas al salir del bosque para quitarme ropa y otra más larga en el Lago Lurien para comer e hidratarme. En la cumbre, con paradas incluidas, me planté en 2h exactas, no está nada mal, pero más que el tiempo realizado me quedo con las sensaciones, después del bache tan malo que he pasado con las lesiones, otra vez me volvía a sentir fuerte.
He subido muy rápido y apenas he tenido tiempo de contemplar el paisaje, asi que me quedo un buen rato en la cima que para eso me lo he ganado, charrando con una pareja de montañeros veteranos navarros que se conocían el Pirineo de punta a punta, identificando desde la cima cumbres que yo no había subido ni había oído hablar de ellas, que envidia, ya me gustaría a mi llegar a sus años con este nivel de vitalidad y conociendo el Pirineo como se lo conocen ellos. Las vistas desde esta cumbre son magníficas aunque el día estaba velado con amenaza de tormentas y la visibilidad no era todo lo buena que me hubiera gustado.
Se está muy bien aquí pero hay que bajar. Al fondo veo el Lago Lurien, y mucho más al fondo, en pequeñito, el Lago de Fabreges, son 1.600m de desnivel negativo que voy a aprovechar para entrenar las bajadas corriendo, una de mis grandes carencias que se ha incrementado con la reciente lesión en mis tibiales. Si antes me costaba bajar rápido por terreno técnico de alta montaña, ahora el esfuerzo es mayor si cabe.
Con las incidencias que os voy a comentar, una hora y media después estaba de vuelta en el coche. La bajada es muy guapa pero cuando llegué al coche todavía me salía la adrelina por todos los poros de mi cuerpo.
Al final, muy buen entreno, con muy buenas sensaciones en una montaña que todavía no conocía y que os recomiendo de verdad. En serio, animaros a salir del Portalet, bajad unos pocos kilómetros con el coche, y veniros a esta pedazo de montaña, seguro que no os decepciona.
Cima del Pic Lurien (2.826m).
Lago de Artouste desde la cima.
*DESCENSO ACCIDENTADO Y ATAQUE DE 3 MASTINES PIRENAICOS. Me las prometía yo muy felices ese día. Desde la cumbre había bajado en un plis por la pedrera al Lago de Lurien, pasaba del terreno descompuesto a senda y pastizales y ya podía volar literalmente en la bajada. En la barranquera que está justo después del lago, me encontré con un rebaño de ovejas que taponaban la senda de descenso. Es algo a lo que estoy acostumbrado, me he cruzado miles de veces en la montaña tanto con rebaños de ovejas como vacas, asi que no le di la más mínima importancia y continué mi descenso. Cuando alcancé la cola del rebaño, éstas echaron a correr y de repende, justo al lado de la senda, me saltó un pedazo de mastín pirenaico que estaba tumbado y que no fuí capaz de ver desde arriba ya que su pelaje blanco se camuflaba con el de las ovejas.
Se pusó al lado mío y empezó a ladrarme con fuerza. Tras el susto inicial, dejé de correr, y me dispuse a continuar andando mi descenso intentando ignorar al chucho. Pero más abajo estaba todo el rebaño y al perrito no le gustó nada mi maniobra aunque en ese momento no me di cuenta. Así que paso de ladrarme a mi lado a colocarse en frente mío para impedirme el paso mientras seguía ladrandome con fuerza.
Vale Rubén, estás justo en medio de un rebaño de ovejas sin el pastor, en la mitad de la montaña con un mastín pirenaico en frente que está a punto de echarse encima tuyo. ¿Puede ser peor la cosa?. Por supuesto que sí, por que el perrito no estaba sólo, y al oir sus ladridos, otros 2 mástines pirenaicos que también estaban custodiando al ganado y que estaban al fondo de la barranquera, subieron en un plis-plas en su ayuda. Si el primer perro que me había saltado era grande, éstos eran tamaño XL.
Ya soy consciente del fregado tan gordo en el que estoy metido, estos perros no van con balas de fogueo sino con munición real, así que intento mantener la calma y activo el protocolo de ataque de perros, por que en mi vida de corredor ya me han saltado unos cuántos, pero 3 mastines pirenaicos de este tamaño......esto si que es "high level". Me doy la vuelta, andando por supuesto, por que si corres, los perros te consideran una amenaza, sin mirarles a los ojos, por que para ellos es un desafío, y sin hacer movimientos bruscos que pudiesen alterarlos más de lo que estaban.
Para horror mío, cuando me doy la vuelta y emprendo la subida hacia el lago, me rodean en círculo mientras siguen ladrando con fuerza. Estoy a punto de entrar en pánico, el más mínimo error y me destrozarán a mordiscos. Intento mantener la calma, hasta que noto que por detrás me tocan, no sé si con la boca, con el lomo o con la pata, el caso es que al notar el contacto del perro, mi instinto me hizo que me pusiera a correr. No querías correr por la montaña Rubén, pues hoy vas a correr de verdad y no veaís como subía cuesta arriba......aunque fue un error por que para ellos te muestras como una amenaza y, por supuesto, por mucho que corriese ellos me iban a alcanzar al instante. Esta reacción fue consecuencia del miedo que tenía en ese momento.
Pero tuve suerte y el ataque fue sólo de ladridos, tras unos 5 minutos angustiosos de persecución y acoso, los perros se cansaron de mi y se dieron la vuelta. Llego al lago acojonado, por decirlo de alguna manera, y me siento un rato a descansar mientras miro de reojo el fondo de la barranquera por si vuelven los perros a por mi. Estoy a punto de echarme a llorar, qué rato más malo he pasado, pero tengo que bajar y no sé cómo hacerlo.
Mientras tanto, de las orillas del lago aparece una pareja de franceses que se dirijen hacia la barranquera. Les aviso de lo que me han pasado, la chica habla algo español y nos entendemos, estoy tan nervioso que apenas soy capaz de hablar en francés. Me sorprende que pese a mis advertencias, ellos siguen hacia abajo, asi que decido unirme a ellos para ver qué pasa. Mientras bajamos me sorprende también cuánto sabe la chica de perros pastores y de mastines pirenaicos, me explica por qué me han atacado los perros, su misión es guardar el rebaño y ellos han cumplido perfectamente su misión de alejarme de él y evitar que me acercara. Me confirma que si hubiera cometido un error, los perros me hubieran destrozado.
Los perritos están justo en el lugar dónde los he dejado un rato antes, pero en vez de atacarnos, permanecen quietos y cuando la pareja de franceses que va por delante se acerca a ellos, los acaricia sin ninguna consecuencia. Yo voy detrás y me ignoran, un rato antes me estaban acorralando y acosando a ladridos. Vale, aquí pasa algo, le pregunto a la chica y me dice que el muchacho es el pastor.......no me jodas.....cómo puede ser......se dan cuenta de que los perros han tenido un comportamiento peligroso y me piden disculpas sinceras........pero el mal rato que he pasado no me lo quita nadie, aún sueño con los 3 chuchos.
Así que se alguna vez os véis envueltos en una situación como ésta que os sirva de ejemplo. A un rebaño con mastines pirenaicos no hay que acercarse ni de lejos, lo mejor es esperar a que se aleje o buscar un camino alternativo, por que si intentáis cruzarlo os atacarán los perros. Y si os atacan los perros como os pasó a mi, nunca les hagáis frente, lo mejor es darse la vuelta, andando, con la mayor tranquilidad posible, y evitando cruzar las miradas con ellos. Y tal vez, si tenéis suerte como yo, no os pase nada.
Una experiencia que tardaré mucho tiempo en olvidar, ese día manché los calzoncillos, no veáis lo que impresionan los ladridos de 3 mastines pirenaicos cuando te están atacando............joder qué rato más malo pasé.
Ejemplar de Mastín pirenaico.