EL QUE TUVO, RETUVO..........
La familia de corredores al completo en el Pueblo Viejo de Belchite (foto de la organización).
La Extrema de Belchite, cuantas connotaciones tiene para mi tiene esta carrera, una prueba muy especial que siempre me transmite muy buenas vibraciones. En julio del 2007, en formato de Desértica Extrema, como siempre ha sido desde sus orígenes, me puse por primera vez un dorsal en una carrera de trail. Al año siguiente, cuando además de correr, corría mucho y muy rápido y todavía me respetaban las lesiones, fue la carrera en la que más y mejor he rendido, consiguiendo la mejor clasificación que hasta ahora he realizado en una carrera de este tipo y acabando con unas sensaciones inmejorables. Por ello no es ninguna casualidad que cuando en el ya lejano 2008 me decidí a abrir un blog, la entrada y la actividad que lo inaguró fué la Desértica Extrema de Belchite:
Este año la falta de patrocinadores ha provocado que la Extrema de Belchite se realizase en el mes de noviembre, cambiando su formato a Invernal Extrem, y sustituyendo el calor del verano, que tanto caracteriza a esta prueba, por el frio del invierno. De hecho, estaba programada para el 17 de noviembre, pero las condiciones tan adversas de frio, lluvia y barro que hubo el finde pasado, hizo que suspendiera y se trasladase a este domingo. Junto al frio, los organizadores habían diseñado un recorrido de 22km y unos 600 metros de desnivel acumulado.
Pero este año, la Invernal Extrem Belchite iba a tener muchas novedades. Además del frio, me junté con Toño e Iván, dos compañeros de la Facultad que se querían iniciar el mundo del trail y las carreras de aventura. Me hizo mucha ilusión coincidir con ellos, mucho más que correr la carrera, cuantas juergas nos hemos corrido juntos en nuestros tiempos jóvenes, vernos juntos a los 3 vestidos de "romanos" para hacer deporte era una imágen inusual que espero que se repita muchas más veces. Alucinante la cara de ilusión que tenían los 2 cuando les estaba dando los consejos previos a la carrera.
Con Iván y Toño, dos compañeros de la Facultad, seguro que nos veremos en más carreras.
La otra gran novedad de la carrera eran las connotaciones históricas que tenía el trazado de la misma. Desde el año 1935, en que se realizó la última Carrera de Pollos (eran las carreras populares que se celebraban en las fiestas de los pueblos), ningun corredor había vuelto a pasar por las calles del Pueblo Viejo de Belchite. Entre medio, una guerra que devastó un pueblo entero y que lo hizo desaparecer para siempre. Muchas, muchísimas gracias a la organización por habernos permitido tener el honor de ser los primeros corredores en 78 años que volvían a correr por las calles del Pueblo Viejo de Belchite. Se me pusieron los pelos como escarpías y me quedo corto..............
Corriendo por las calles del Pueblo Viejo de Belchite, 78 años después de que lo hicieran los últimos corredores (foto de la organización).
La Invernal Extrem hizo honor a su nombre y el domingo nos recibió con unas temperaturas desplomadas y ráfagas muy fuertes de cierzo. Desde el pabellón de deportes hubo una salida neutralizada hasta el Pueblo Viejo de Belchite dónde todos nos hicimos las fotos de rigor. Los de la carrera larga, entre los que me encontraba, salimos 15min antes. Salida rápida en la que recorrimos en sus primeros metros las calles del Pueblo Viejo de Belchite. Supongo que fue la emoción del momento pero el caso es que salí completamente desbocado encabezando la punta del pelotón de la carrera.
Por las calles del Pueblo Viejo de Belchite, voy encendido y en el grupo de cabeza de la carrera (soy el segundo de la fotografía)-foto de la organización.
Los 2 primeros kilómetros los hice muy rápidos junto a los primeros de la carrera. El ritmo tan alto con el que empezamos me ayudó a entrar en calor, pero pronto decidí bajar el ritmo lo que provocó que me quedase mucho rato descolgado y prácticamente sólo entre el grupo de cabeza, muy rápido y de unos 10 corredores y el resto del pelotón, que en ese tramo iba más lento que yo, algo que fue nefasto y que me dejó muy expuesto ya desde el principio al fuerte cierzo con el que tuvimos que luchar durante toda la carrera.
Los 2 primeros kilómetros los hago a un ritmo muy intenso y voy en los primeros puestos de la carrera. ¿Pagaría estos excesos más tarde?.(foto de la organización).
Y es que esta vez iba a la Extrema de Belchite con un deficit de entrenamiento importante que me dejaba muy alejado de mi estado de forma ideal. Tras alcanzar este verano los verdaderos objetivos fijados para el 2013 y con el nuevo horario invernal que me obliga a entrenar de noche y con la frontal, algo que no me gusta nada, llegaba a esta carrera totalmente falto de entrenamiento. Sí, estas últimas semanas estaba entrenando, pero digamos que era "gimnasia de mantenimiento". Este planteamiento me quitaba presión pero me dejaba muy expuesto a los rigores y dificultades de la carrera, asi que cualquier error que cometiese lo podía pagar muy caro. Y los primeros kilómetros de la carrera los estaba haciendo a fuego..........
Estepa, frio intenso y soledad, una bella imágen que resume perfectamente la belleza y la dureza del recorrido de la Invernal Extrem Belchite (foto de la organización)
Aunque hasta Almonacid de la Cuba el recorrido picaba constantemente hacia arriba, no fue hasta superar este pueblo cuando empezaron de verdad las cuestas. Se me antojó un recorrido muy montañero y técnico, en algunos momentos íbamos fuera de senda lo que unido a la fuerte inclinación del terreno, hizo que en algunos tramos me tuviera que poner a andar. A pesar de que me falta la chispa de antes del verano, subo a un ritmo fuerte, que me permite ir con cierta comodidad. De momento, no está pasando factura el esfuerzo de los primeros kilómetros de la carrera.
El tramo del cresteo tuvo su miga. Aquí estábamos muy expuestos al Cierzo, que en algunos momentos era salvaje, lo que unido a la temperatura tan baja que había, hizo que tuviéramos unas condiciones invernales totales. Había que tener cuidado por que una ráfaga de éstas te podía desequilibrar y tirarte al suelo pero lo peor de todo es que en este tramo llevábamos todo el rato el viento en contra y de costado y soplaba tan fuerte que te impedía respirar con normalidad. A pesar de llevar el cuello protegido, hoy tengo la garganta tocada, efectos colaterales de una carrera de estas características.
Luchando contra el frio intenso y el cierzo salvaje en el tramo de cresteo. Al fondo se puede ver la interminable estepa que tendremos que atravesar en el tramo final de la carrera (foto de la organización).
Tras una bajada muy pronunciada en la que me tiré a tumba abierta, la organización nos llevó hasta el Santuario de Nuestra Señora del Pueyo. Se había acabado el tramo técnico y las cuestas, ahora empezaba el llano y la estepa, unos cuantos kilómetros sin nada de protección en los que íbamos a tener que seguir sufriendo el cierzo.
Punto kilométrico en el Santuario de Nuestra Señora del Pueyo (foto de la organización).
Desde que hago trail y carreras de montaña he perdido mucha velocidad y el llaneo se me da muy mal. Estaba en el tramo crítico del recorrido, en dónde tenía miedo de pagar el exceso de ritmo que había llevado al principio de la carrera. Me vuelvo a quedar sólo y sin la posibilidad de protegerme con otros corredores, yo sólo desafiando al frio y a los elementos en medio de la estepa de Belchite, puede parecer una locura pero a pesar del cansancio que ya llevaba encima fue el tramo que más disfruté.
Tiré de oficio y de la experiencia que ya empiezo a acumular en este tipo de carreras y me tomé este tramo con mucha filosofía llevando un ritmo de carrera muy bueno, demasiado bueno para los kilómetros que llevaba y el desnivel acumulado. Conseguí que los excesos del primer tramo de la carrera no me pasaran factura, gestionando muy bien los esfuerzos y los kilómetros que me faltaban.
Crucé la meta de Belchite con muy buenas sensaciones y con una crono de 1h:50min.23seg, 10 minutos menos de lo que me había planteado antes de salir y en el puesto 26 de 102 corredores. Qué inyección de moral, otra vez con unas sensaciones excelentes en la Extrema de Belchite, muy , pero que muy contento con este resultado, y es que el que tuvo, retuvo, a pesar de no haber entrenado lo suficiente para esta carrera, llevaba acumulado todo el bagaje de este año tan intenso en lo que a carreras de larga distancia se refiere.
Mi llegada a meta, viviendo otra vez sensaciones inmejorables en Belchite.
Después de la carrera a felicitar a los compañeros, que han debutado en el trail en la carrera corta, y que han acabado muy contentos y con unos resultados excelentes. Risas, cervezas y ducha de agua fria ya que se había acabado el agua caliente en el pabellón, os puedo asegurar que la verdadera Invernal Extreme estuvo en los vestuarios del pabellón...........
Al final todos ganamos y con una cerveza en la mano se ve todo de otra forma.
Quiero acabar esta entrada con esta última imágen en la que estoy posando al final de la carrera con los dorsales de la Carrera del Ebro, la Transmontes Blancos Trail y la Invernal Extreme Belchite. Entre las 3 carreras suman los 102 kilómetros que he corrido este año por los desiertos y estepas de Aragón. Por este año he tenido más que suficiente pero creo que esta imágen resumía perfectamente una parte muy importante de lo que ha sido este 2013. Un año para el recuerdo, imposible estar más contento.
Un resumen de mi 2013.