RAQUETAS DE NIEVE POR EL ENTORNO DE CANFRANC-ESTACION
Esta ultima semana he asimilado mal los entrenamientos. He salido a entrenar con las piernas muy cansadas y, aunque me encontraba bastante fuerte para afrontar las salidas con cuestas y desniveles de estos ultimos días, me ha faltado "power" y he acabado con las piernas bastantes infladas. Pero lo más preocupante ha sido que mi pie derecho se ha quejado bastante. Ya me parecia a mi que todo iba demasiado bien aunque desde el principio he sido perfectamente consciente de que preparar una carrera de 30km para primeros de marzo era moverse en unas fechas demasiado tempranas en el calendario que implicaba ir justo de preparación y el riesgo de que la carga de entrenamiento me pasara factura. En realidad contaba con todo esto pero como iba como un tiro en la preparación, pensaba que por una vez iba a librarme.
Es muy importante saber escuchar a tu cuerpo y en estos momentos me estaba pidiendo descanso a gritos. Estas circunstancias han determinado la salida de este fin de semana. En Zaragoza anunciaban un huracán, asi que era inviable plantearse salir a trotar por el monte. En el Pirineo también daban una buena soplada y las temperaturas desplomadas, pero eligiendo bien la ruta se podría hacer algo al resguardo del viento.
Aprovechando las nevadas de este ultimo mes, decidimos marchar al entorno de Canfranc-Estación para darnos un paseo con las raquetas por las numerosas sendas y pistas forestales que salen de la parte trasera de la estación de tren. Son rutas cortas que acumulan suaves desniveles, ideales para dar el descanso necesario a mis piernas y disfrutar de una bonita salida invernal por el monte.
Llegamos a Canfranc-Estación con -9º y una ventolera importante. La cabecera del Valle del Aragón está completamente cubierta y a ratos se escapan copos de nieve, mal día para salir al monte. Dejamos el coche en la pista de Coll de Ladrones y subimos por un pista forestal hacia la Caseta Blanca.
La pista va por un frondoso bosque de repoblación que nos protegerá durante toda la excursión del fuerte viento que sopla ese día. Ha sido todo un acierto elegir esta ruta.
En la Caseta Blanca pillamos la pista que sube hacia Picaubé para desviarnos enseguida por la senda de los miradores que sube hasta la Fuente de los Ingenieros.
Esta senda es una delicia. Está muy innivada, algo que no ocurre todos los años, y nos permite disfrutar de una bonita ruta en medio de un bosque muy frondoso. Tanto la senda como la pista suben de forma muy suave, aunque constante, por lo que es un recorrido ideal para hacerlo con raquetas de nieve.
Alcanzamos el primer mirador, que en realidad es uno de los para-aludes que construyeron a principios del S.XX para proteger de las avalanchas el entorno de Canfrac-Estación, y desde alli continuamos hasta la Fuente de los Ingenieros.
En la Fuente de los Ingenieros damos por terminada nuestra excursión ya que tenemos que estar pronto en Zaragoza. Aunque hace mucho frio, estamos resguardados del viento y nos paramos un rato a almorzar y a bebernos el termo de té caliente que hemos traido con nosotros. Qué gustico da estar a unos -10º bebiendote un vaso de té ardiendo.
El descenso lo hacemos por un sitio diferente enlazando sendas al principio y una pista forestal después, para realizar de esta manera una bonita ruta circular con raquetas de nieve por los bosques de Canfranc-Estación.