Por fin hemos podido acercarnos a una de las zonas de escalada más famosas y reconocidas de España. Ha sido un viaje improvisado, nos fuimos casi sin información y reseñas.Mil gracias a los escaladores catalanes que nos encontramos y que tuvieron la paciencia de hacernos de guía improvisada en nuestro periplo monserratino. Me gustó mucho el buen rollo que tuvimos con la gente.
Este sitio es un edén vertical. Más de 3000 vías de escalada, como para estar escalando en este sitio toda la vida. Mires por donde mires sólo se ven cientos de agujas (sí, escribo bien, cientos de agujas), tapias y roca vertical. No dudo al afirmar que es uno de los mejores sitios en los que he estado escalando.
La roca es un conglomerado muy diferente al que estamos acostumbrados, de una calidad excelente. La escalada es muy técnica y nos obligará a mover bien los pies para salir airosos de las vías. Es mejor ser humildes en nuestra primera visita a esta zona y aclimatar con la roca, ya que el grado monserratino no se regala.
Iba a meter en esta entrada una descripción de las zonas en las que estuvimos y de las vías que escalamos, pero para que lo voy a hacer si en Monserrat, vayas a donde vayas, todo es bueno. Habrá próximas visitas..........
1 comentario:
La cabra es muy bonita, pero que muy bonita. Yo las veo caminar por el campo con ese porte, subir paredes, deambular con sus carros de la compra, y es que me enamoro. Cojo el manojo de hierbas y corro tras ellas para dárselas de comer pero se asustan. Igual se piensan que quiero tema, y no es el caso. Yo creo que tienen más inteligencia artificial que los presidentes y los alcaldes, aunque en ciertas diputaciones hay verdaderos linces ibéricos que parecen cabras. Claro, la cabra cuenta con una ventaja añadida: su visión 360 ºC gracias a su intensa y viril mirada bipolar, un ojo en cada polo. Por eso sabes que te ven aunque no te estén mirando. Y suben paredes y las bajan y suben árboles que parecen zarigüellas. Es una gozada con ellas.
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