miércoles, 26 de octubre de 2011

EL OTOÑO EN ANSO: EL BOSQUE DE GAMUETA


Desde hace unos años, cuando llega la estación otoñal, dedicamos al menos un fin de semana año para recorrer los bosques de hayas de los Pirineos y del norte de España. El objetivo siempre es disfrutar del espectáculo visual y del colorido que ofrecen estos bosques cuando llega la estación otoñal. En los años pasados nos hemos centrado sobretodo en Irati al que le hemos entrado por varios sitios (por cierto, me doy cuenta que no tengo ni una sola entrada de este sitio en el blog, a ver si me animo un día), aunque también hemos pasado por la Sierra de Cameros, los bosques de Ordesa y la Sierra de Urbasa.



Este año hemos querido cambiar y conocer sitios nuevos y nos hemos decidido por los Valles Occidentales del Pirineo Aragonés. Hace tiempo que había oído hablar del Bosque de Gamueta, en Ansó, al que las guías turísticas del valle le consideran como el bosque de hayas mejor conservado de todo el pirineo aragonés. Este sitio no lo conocíamos asi que era el destino ideal para la actividad que nos habíamos planteado.



Desde el Refugio de Linza sale este sendero balizado que nos lleva en un recorrido circular de unos 7 km y 2 horas de duración por el corazón de este bosque.






Advertir que la zona alta del sendero va por una zona abierta de pastos. A mi personalmente me decepcionó un poco esta parte ya que en este tipo de rutas que nos planteamos lo que buscamos es hacer recorridos que vayan íntegramente por bosques de hayas.


La Peña Ezcaurre destaca sobre el bosque de Gamueta en la zona alta del sendero



Como esperábamos, este año tan escaso en precipitaciones ha retrasado la estación otoñal. El bosque ya estaba vestido con sus atuendos otoñales pero aún había muchas copas de los árboles que estaban verdes. Esto, junto con lo seco que estaba todo, provocaba que no estuviese el bosque en su pleno esplendor.

De todas formas, pudimos disfrutar de rincones muy bonitos en lo que el otoño ya había dejado sus pinceladas de tonos ocres y amarillos. Además, estas actividades las realizamos al más puro estilo dominguero, con la bota de vino y el bocata de jamón, a la marchica que se trata de disfrutar al máximo de la naturaleza y por su puesto con el objetivo de la cámara de fotos trabajando a pleno rendimiento.


A la tarde, como hacía buen día y nos sobraba tiempo, nos dedicamos a hacer turismo por las calles de Hecho, pueblo que Marta no conocía aún, y asi disfrutar de su peculiar arquitectura tradicional, con sus chamineras y espantabrujas, y del cheso, dialecto del aragonés de este zona de los Pirineos que aún se puede escuchar a los lugareños por las calles cuando el turismo de masas abandona el valle.

Arquitectura tradicional en Hecho

Las chamineras tradicionales de Hecho


El fin de semana aún dio para mucho más pero eso lo dejo para futuras actualizaciones que hoy no tengo más tiempo.

lunes, 17 de octubre de 2011

ASCENSION AL COTIELLA


Este ultimo mes he estado prácticamente ausente del monte y claro, las ganas de salir acumuladas eran más que considerables. Para este ultimo finde, ultimo de las fiestas del Pilar, los planes no pasaban por salir al monte, pero a ultima hora he podido librar y desquitarme de las ganas de Pirineo que tenía.
Muchas ganas de hacer monte y mucho tiempo sin salir = a cabeza caliente = a planes descabellados. Todos los años suelo hacer una actividad en solitario por valles o cumbres poco frecuentadas de los Pirineos y este año por diversos motivos no lo había hecho, asi que éste no podía ser mejor momento para intentarlo, eligiendo como destino la cima del Cotiella y como objetivo un vivac en solitario en su cumbre en plena estación de otoño.
¿Y por qué en el Cotiella?. Primero por que no había subido a su cumbre y por que esta montaña cumplía los requisitos de soledad y aislamiento que tanto buscaba para hacer una actividad en solitario.
Y segundo por que mi relación con esta montaña es un tanto peculiar. Es cierto que todavía no había pisado su cumbre pero por contra ya había realizado en este macizo actividades digamos un tanto peculiares. En noviembre del 2004 con Nico y Ángel, en otra calentada de cabeza similar a la que me esperaba este finde, ascendimos el corredor de la Gran Diagonal a la Punta Armeña, actividad reseñada en este blog. Esta actividad la recuerdo como una de las más duras y físicas que he realizado en los Pirineos. En ese momento los tres desconocíamos las verdaderas dimensiones de este macizo, los desniveles tan fuertes que hay que salvar asi como su naturaleza kárstica, lo que hizo que además de la tremenda paliza física que nos pegamos para subir y bajar este corredor, bajásemos completamente deshidratados al no encontrar ninguna fuente de agua durante todo el día.


El Cotiella visto desde la base del Circo de Armeña


La segunda y ultima vez que había visitado este macizo fue en primavera del 2010 y también para hacer otra actividad poco conocida y que también está reseñada en este blog: la Cueva 5 de Agosto. Esta vez la dificultad radicaba en localizar la boca de la cueva debido a la escasez y la dificultad que hay para encontrar información sobre estas cavidades.
Con estos precedentes, mi visita a esta montaña tenía que ser por la puerta grande y de ahí mi planteamiento de vivaquear en solitario en su cumbre en plena estación otoñal. Asi que el sábado por la mañana salía cargado con el mochilón a andar por la pista de Barbaruens en dirección al Circo de Armeña, vía elegida para ascender esta montaña.
En un plis-plas me planto en el refugio de Armeña, voy super motivado y subo a toda pastilla. La meteo estaba garantizada para este finde pero durante toda la marcha de aproximación las nubes cubren todas las montañas circundantes y una vez en el refugio, a las puertas de entrada del Circo de Armeña, todas las cumbres están muy cubiertas.

Las nubes tapan a mi llegada todas las cumbres del Circo de Armeña


Me entran dudas y decido esperar a ver qué pasa. Hacia al sur se abren claros a ratos pero enseguida se vuelve a cerrar. En el Circo de Armeña la cosa, en vez de mejorar, cada vez se cierra más. Sé que no va a llover y que la noche se espera estrellada pero no estoy por la labor de llegar a la línea de cumbres y encontrarme todo tapado por las nubes. Espero a las 4 de la tarde, hora tope que me he marcado para subir, y tras ver el panorama decido quedarme en el refugio.
Este refugio libre es una maravilla, para mi un modelo de lo que debe ser un refugio de montaña en los Pirineos, muy bien cuidado, con capacidad para unas 20 personas, radio de emergencia, chimenea, emplazado en un lugar seguro y visible desde lejos y, lo más importante y la razón por la cuál había elegido esta vía de ascenso, con una fuente de agua en las inmediaciones. Si tenemos en cuenta que en el Cotiella casi no hay fuentes de agua, creo que el emplazamiento de este refugio no puede ser más acertado. Por la tarde-noche vienen otras tres personas con las que comparto esta instalación de montaña.

El bonito y estratégico emplazamiento del Refugio de Armeña


Cambio de planes para el día siguiente. Ya no hay puesta de sol y amanecer desde la cumbre, tendré que salir desde abajo y encima no estoy del todo solo. Esto lo suplanto madrugando mucho al día siguiente para hacer casi toda la ascensión de noche y tener para mi solo todo el macizo. Aunque cuando nos vamos a dormir el cielo está aún más encapotado, cuando me levanto por la mañana (o es aún por la noche?) el cielo está completamente estrellado.
Tengo que decir que las sensaciones que experimenté ascendiendo completamente sólo por la noche en la inmensidad del Circo de Armeña fueron increibles. Obscuridad y silencio absolutos sólo rotos por el haz de luz de mi frontal.
Conforme ganaba altura a la montaña, no podía dejar de mirar hacia atrás y contemplar el espectáculo que iba a tener el privilegio de vivir dentro de un rato. Sí, hoy hay inversión térmica, los valles de la cara sur de los Pirineos están cubiertos por las nubes y desde la línea de cumbres se puede ver un mar de nubes perfectamente formado.


Hoy el amanecer promete ser espectacular, quiero que me pille lo más alto posible asi que le pego un pretón a la marcha. Y al final, cerca del collado, a unos 2.800 metros de altura y en un lugar de mucha visibilidad, pude tener el privilegio de ver salir el sol por debajo del inmenso mar de nubes que había formado.

El astro rey empieza a asomar por debajo del mar de nubes


Creo que ha sido el amanecer más espectácular que he visto en los Pirineos, sólo por esto ya ha merecido la pena el esfuerzo y haber llegado hasta aquí. No ha podido ser el vivac en la cumbre pero este amanecer ha cubierto de sobras mis espectativas para esta actividad y encima estoy completamente sólo, con toda la montaña para mí y disfrutando de este momento, qué más se puede pedir.......

Espectacular amanecer desde el collado


En estos momentos ya me da igual la cumbre pero ya que estamos aquí tocaremos chufa. Mientras subo las ultimas rampas hasta la cima, flipo con el mar de nubes que tengo formado bajo mis pies.

Mar de nubes sobre la cara sur de los Pirineos


La verdad es que en la cima estoy poco rato, la temperatura es baja y hace algo de viento. Como os podéis imaginar, las vistas que tengo en esos momentos son antológicas.



El descenso lo hago a la marchica. La subida la he hecho de noche y no he tenido la oportunidad contemplar el paisaje que me rodea. El macizo del Cotiella es una montaña desnuda y descarnada, sin nada de vegetación, un desierto de alta montaña que me recordó mucho a Sierra Nevada.

La Punta Armeña o Ramón d´Espouy (Ángel por este corredor bajamos en el 2004).


Una de las cosas por las que se caracteriza el Cotiella y en la que me recreo en la bajada, es por su naturaleza karstica. Aquí el agua de procedente de la nieve y de la lluvia se filtra enseguida , disolviendo el interior de la montaña y creando una compleja red de sistemas subterráneos de alta montaña que está en curso de exploración. Esto hace que sea casi imposible encontrar agua en superficie a partir de ciertas cotas, algo que deberéis tener muy en cuenta a la hora de planificar las actividades que hagáis en esta zona.
Los rasgos de la karstificación del macizo son muy evidentes en el Circo de Armeña y se pueden observar fácilmente en superficie. Fijaros en la siguiente fotografía la gran cantidad de dolinas, a modo de impactos de meteoritos, que se pueden ver desde la parte alta del circo.

Paisaje lunar de dolinas en el Circo de Armeña


Aquí los lapiaces no son muy abundantes pero también encontramos buenas muestras como las de la siguiente fotografía.
Lapiaces


Por contra los pozos y las simas abundan por todas partes. De hecho, la vía de ascenso al Cotiella pasa por el medio de este campo de simas asi que si os planteais subir a la cumbre en invierno, deberéis de tener en cuenta que ésta es una zona peligrosa ya que la nieve las puede tapar y podéis caer en una de ellas.

Multitud de pozos y simas


Como os he dicho, la red subterránea del macizo está en curso de exploración. Si vais con cuidado y os asomáis a alguna de estas simas, podéis encontrar las señales idéntificativas que están dejando los espeleológos mientras las exploran. Si a alguno le interesa, puede pinchar en este enlace y ver las campañas que están realizando alguno de los grupos espeleológicos que trabajan por la zona. También podéis consultar esta página web con el catálogo de cavidades del macizo que está realizando la Asociación Científico Espeleológica Cotiella

Marcas de exploración de las cavidades


Me marcho del Cotiella con unas sensaciones inmejorables ya que hasta ahora todas las actividades que he realizado en este macizo han sido de las que marcan huella.
Seguro que habrá próximas aventuras..........

martes, 11 de octubre de 2011

PICO BORON

Frente al Puro de Vadiello


Este blog lleva unos días dormido debido fundamentalmente a la falta de actividades de las ultimas semanas. Entre bodas, despedidas de soltero, cumpleaños y quedadas varias, el monte solo lo veo en pintura. Por un lado está bien ya que estamos quedando y viendo a gente que hacía mucho que no veía (es lo que tiene salir al monte casi todos los findes del año que se puede) pero por otro lado tantos eventos sociales están siendo demasiado para un "culo inquieto" como el mío y las ganas de hacer cosas y de salir empiezan a ser considerables. Paciencia por que aún estaré empantanado hasta finales de este mes.
Esto provoca que, aunque se tenga el finde ocupado, el más mínimo hueco se aproveche para salir a hacer algo, aunque sea sólo un paseo de media jornada, y que mejor escenario para esto que nuestra querida Sierra de Guara.
Ya sé que es imperdonable, pero a estas alturas de la vida aún no había estado ni conocía Vadiello. Había que saldar esta deuda pendiente por lo que decidimos aprovechar este hueco de media jornada para ir a visitar este bonito rincón de la Sierra de Guara y para ello decidimos hacer una excursión clásica que nos permitiera conocer el macizo: la ascensión al Pico Borón.
Desde una explanada cercana a la presa del embalse, parte la senda de ascenso a esta cumbre. El inicio del ascenso está marcado con un cartel indicador. Los primeros metros son muy empinados y nos permiten ascender hasta las terrazas superiores del circo.

Las vistas desde este punto son excepcionales y esto no ha hecho más que empezar. Frente a nosotros el paisaje vertical de los Mallos de Ligüerri. Buah, qué pedazo de tapias, estos mallos son de los que quitan el hipo cuando se miran desde su base. Al fondo tenemos la primera vista del Pico Borón, el objetivo de este día, pero ante esta visión el Borón pasa a un segundo plano a la vez que no puedo dejar de mirar de reojo estas formidables paredes de conglomerado de las que tanto había oido hablar.


Vista general de los Mallos de Ligüerri (al fondo el Pico Borón)


El primero de los mallos que nos muestra su arrogancia vertical es la Mitra, un mallo puntiagudo separado del macizo principal y una de las principales escaladas clásicas de este macizo.


El monolito inexpugnable de la Mitra


Y conforme vamos ganando altura y nos vamos acercando a la base de los Mallos de Ligüerri, se va perfilando perfectamente la silueta del Puro de Vadiello. Qué aguja más impresionante y cuantas historias he leido sobre la escalada de este mallo!!!!!. Es la primera vez que lo veo con mis propios ojos y creo que habrá que ir pensándo en fumarsélo por que a partir de ahora su cima ya es un objetivo personal aunque antes habrá que prepararse para afrontar esta escalada y buscar un compañero que me quiera acompañar.

La arrogancia vertical del Puro de Vadiello



Y desde este punto, tenemos unas vistas muy buenas sobre el Embalse de Vadiello.



Enfrente nuestro está la Canal de Ligüerri, paso clave de esta ruta. Esta sección del camino está muy empinada y nos obligará a echar las manos en numerosas ocasiones.


La canal de Ligüerri vista desde su base



Los metros finales antes de llegar al collado presentan un par de resaltes verticales que, sin ser especialmente difíciles, hay que estar acostumbrados a trepar por este tipo de terrenos y pueden ser muy delicados con la roca mojada, especialmente los flanqueos terrosos que hay colgados por encima de ellos.

Trepadas finales de la canal que pueden ser delicadas y expuestas con roca mojada


Tras superar este incómodo paso llegaremos al collado, por encima de la línea de cumbres que delimitan los Mallos de Ligüerri. Al fondo, esta vez sí, el Pico Borón y el cresteo que tendremos que afrontar para llegar a la base de esta cumbre.

La pirámide cimera del Pico Borón

Desde este pequeño cresteo, en el que subiremos y perderemos altura varias veces, tenemos una vista magnífica de la Peña de San Cosme, atravesada por los Barrancos de las Canaletas y de las Cuevas de la Reina, dos cañones muy verticales que caen directamente sobre las aguas del pantano. Este sitio también tendremos que venir a visitarlo........

Vistas de los acantilados de la Peña de San Cosme y de sus cañones


Ya solo queda afrontar la empinada pala final que nos lleva hasta su cumbre. Las vistas desde esta cima son impresionantes, ha sido todo un acierto. La verdad es que no me esperaba que esta zona de la Sierra de Guara fuera tan bonita.


Cumbre del Borón. Vistas hacia el norte con el Tozal de Guara, el Fragineto y los Pirineos de fondo



Contraluz en la cumbre del Borón. Al fondo la Hoya de Huesca


Las cumbres dominantes de la Sierra de Guara: el Fragineto y el Tozal de Guara


No es una cumbre muy alta pero domina todo el cañón que ha formado el río Guatizalema a su paso por estas tierras. El cañón forma un paraje vertical y muy accidentado, con accesos complejos, entre paredones de caliza y conglomerado, y parcialmente sumergido por las aguas del pantano. Un paraje sorprendente que es un paraiso para escaladores, barranquistas y montañeros en general. Si no conocéis este sitio, no dudéis en perderos por estos senderos.

El Embalse de Vadiello.


Miremos por donde miremos, hay mallos y paredones por todos los sitios. Sin duda alguna, es uno de los cañones más excavados de toda la Sierra de Guara.

Vistas del Huevo y de la Peña de San Cosme


Durante la excursión estuvimos vigilados por numerosas cabras semisalvajes


La verdad es que me ha encantado y me ha sorprendido mucho este sitio. Me llevo un buen saco de ideas y de actividades pendientes, creo que el próximo año visitaremos más veces Vadiello........