domingo, 4 de noviembre de 2012

CUEVA DE LA UBRIGA

 
ESPELEO EN LA SIERRA DE ALBARRACIN


Continuamos con las entradas atrasadas.  Este verano nos juntamos de nuevo Sergio, Marta, David "Malabarista" y yo con la intención de hacer espeleo. Esta vez nos vamos a la provincia de Teruel, concretamente a la Sierra de Albarracín, a la localidad del Vallecillo, con el objetivo fijado en la Cueva de la Ubriga. Esta cavidad es muy atractiva muy varios motivos. En primer lugar, con sus 3.417m, es la cavidad de mayor desarrollo de la provincia de Teruel. Además, tiene salas bastante concreccionadas que están consideradas entre las más bonitas de toda la provincia. Y por ultimo, estamos hablando de una cueva activa con un río subterráneo en su interior que pone su punto de dificultad a la actividad.

 

El primer tramo de la cueva, hasta el Sifón Subils, es algo perdedor. Tras algunas arrastradas y alguna pequeña zona inundada, la continuidad de la cueva se encuentra a través de un paso en alto que puede pasar desapercibido y que nos costó un poco encontrar. Dicho paso se supera con una fácil trepada y nos deposita en el único pozo de la cavidad en el que tendremos que hacer uso obligado de las cuerdas.  Al loro con la instalación de este pozo ya que los spits de la cabecera están en mal estado.




Una vez en la base del pozo, seguiremos hasta el segundo gran obstáculo de la cueva: el Sifón Subils.  Estamos ante un paso histórico. Esta cavidad fue descubierta en el año 1961 en la denominada como Operación Turolensis por los hermanos Josep y Frances Subils, junto con Frances Cardeña, miembros de la Secció d´Exploracions Subterránies del Club d´Esquí Puigmal de Barcelona, pero se tuvieron que detener ante un paso sifonante. En 1963 vuelve de nuevo Josep Subils junto con Emili Sabaté, superando esta galeria sifonante mediante escafandras autónomas. Esto fue un hito dentro de la historia de la espeleología española ya que fue el primer sifón que se buceó en España dentro de una cueva.
En la actualidad, y siempre que el sifón se encuentre en niveles normales de estiaje, se puede superar a pulmón libre ya que apenas tiene 1,5m de longitud en su parte sumergida y además está instalado con una cuerda guía que te permite salir con facilidad al otro lado del sifón. Sin embargo, el paso no es tan sencillo como parece. La temperatura del agua está muy fria, para acceder a él hay que nadar por una galeria semi-inundada por la que llega el agua a unos 3-4 dedos del techo lo que nos permitirá el espacio justo para sacar la nariz y respirar; para colmo, por esta pequeña abertura sopla una fuerte corriente de aire, y por si se nos había olvidado, estamos en la más completa y absoluta oscuridad. Lo dicho es fácil, pero a mi, que no me gustan nada los sifones, ni siquiera en el exterior cuando hacemos barrancos, estas condiciones me intimidaron lo suficiente.


 Foto histórica de la superación del Sifón Subils en el año 1963 (foto obtenida de la página http://espeleologiabibliografia.blogspot.com.es/ )


Más allá del sifón, unas galerias fósiles meandriformes sin ninguna dificultad a reseñar nos llevarán primeramente a la "Sala Blanca" y después, mediante un paso en bajo y varias arrastradas más,  a la "Sala Carmen Tarrés". Teníamos muchas espectativas en estas salas, ya que en relación con el resto de la cueva están muy concreccionadas y se las consideran como las más bonitas de la provincia de Teruel, pero tengo que decir que nos decepcionaron un poco. No es que sean feas, todo lo contrario, pero llevábamos espectativas más altas antes de entrar a la cavidad. 
Tras la sala Carmen Tarrés, una pronunciada rampa descendente que es mejor hacer con la cuerda instalada, nos deposita en el río, en el nivel activo de la cavidad. Nosotros nos detuvimos en este punto, entramos bastante tarde a la cueva y se nos echó el tiempo encima. La vuelta al exterior, con el camino conocido, la hicimos muy rápida.
En general podemos decir que es una cueva muy completa. Prácticamente es una cueva horizontal pero no nos tenemos que llevar a engaño. La presencia de agua en su interior, muy fria por cierto, con pasos sifonantes y un río subterráneo, pondrá el punto de dificultad a la cueva y también le dará el interés a la actividad.
Como apenas hice fotos, os dejo un pequeño montaje que hice con los vídeos que grabé dentro de la cueva. Perdonad por la calidad de las imágenes, ese día no estaba muy inspirado.



2 comentarios:

David Serrano dijo...

Esperaba poca cosa del video, y al final me ha gustado! La elección de la música también.

Lo cierto es que en una cueva tan larga, y tan costosa, pararse a hacer las fotos cuesta lo suyo!

Gracias por compartirlo, a ver si en unos días, pongo mi reportaje en mi blog!

Un saludo!

RUBEN dijo...

El vídeo no es bueno, pero ese día no dedicamos tiempo a sacar imágenes y además tampoco estaba inspirado.De todas formas, me alegro que te haya gustado. Si lo quieres en más resolución, dímelo y te lo mando.
Yo ya estoy terminando mis actualizaciones del blog, llevaba mucho retraso acumulado, ya me queda poco.
Salud(os)