miércoles, 2 de mayo de 2012

UN POCO DE TODO

En la cima del Cabezo Sillón (María de Huerva) bajo una cortina de agua.


Estos días han sido un poco extraños en lo que a actividades se refiere. A la mala meteo de estos días se han juntado obligaciones varias que nos han dejado en casa o nos han dejado poco tiempo para salir. Pero esto no quiere decir que hayamos estado parados, todo lo contrario, ya que llevo unas semanas especialmente activas en lo que a correr se refiere.

Bonitas y espectaculares sendas colgadas  sobre los barrancos que bajan de la Plana


Desde la Carrera del Ebro, he intensificado de forma notable mis entrenamientos de entre semana, que han ido acompañados de alguna salida mañanera por la Sierra de Guara.


El Cabezo Sillón desde el Nisupu, tras combinar su ascenso con la subida a la Plana.



El planning en mis entrenamientos es siempre el mismo: sendas y trialeras con el mayor desnivel posible combinadas con tramos más o menos llanos dónde poder oxigenar un poco los pulmones y adaptarme a las largas distancias.

 Desorientado por la niebla en las pistas de la Plana (al fondo se tendrían que ver los aereogeneradores)


Mis entrenamientos habituales los realizo por los acantilados de los Galachos de Juslibol. Esta zona se encuentra relativamente cerca de mi casa y presenta terrenos apropiados al tipo de entrenamiento que estoy buscando aunque es una pena que los desniveles no sean más grandes. Aún así, explotando al máximo las trialeras que hay por esta zona salen calentones buenos para dejarnos las piernas a tono.



 La senda de ascenso al Cabezo Sillón (al fondo María de Huerva, punto de salida del entrenamiento de ese día).


 Aunque más que nunca este año estoy explotando al máximo los barrancos de la Plana de María de Huerva y Cadrete, que es la zona más cercana a Zaragoza dónde se encuentra el verdadero paraiso de los aficionados a la bicicleta de montaña y al trail running. En esta zona, además de encontrarse los máximos desniveles que podemos hacer en el entorno de Zaragoza, hay numerosas sendas y trialeras muy técnicas que van y vuelan literalmente por los numerosos barrancos que descienden desde la Plana de forma muy vertiginosa hacia el cauce del río Huerva.  

El puerto de la Plana de Cadrete, el Nisupu, la Plana de la Balsa, el Barranco Morera o el Cabezo Sillón , entro otros, están siendo ultimamente los escenarios de  mis entrenamientos, ya que por separado o combinados todos ellos permiten hacer recorridos muy técnicos dónde poder acumular bastantes metros de desnivel. 


 El bisonte del Nisupu, un clásico de los recorridos trialeros de la Plana.


La meteo tan adversa de estos días no me ha impedido salir pero en ocasiones ha endurecido bastante mis entrenamientos. En estos días me ha llovido, me ha granizado, me ha pillado la niebla en la Plana provocando que me desorientase en las numerosas pistas que hay por alli arriba, e  incluso tuve un encuentro con un jabalí que no me pudo oir por la fuerte lluvia que estaba cayendo (por cierto, menudo susto,  pero por suerte mi encuentro con el animal se quedó en una divertida anécdota que contar).


 Antes de empezar el ascenso al Pico de las Calmas desde Nueno (al fondo el monte que tendremos que subir envuelto por la niebla).


Ayer, como tenía un día tonto medio libre decidí salir a correr un poco por la Sierra de Guara. Tuve que ir cambiando de planes sobre la marcha por que además de haber una mala meteo, ha caido bastante nieve por allí arriba asi que decidí intentar subir al Pico de las Calmas desde Nueno y asi acumular  unos 900 metros de desnivel positivo.


 La cara sur de la Sierra de Guara, a 1.200m y en el mes de mayo. ¿Esto es una broma, no?.


 Nieve en los Pozos de Nieve del Pico de las Calmas.


Y digo intentar subir por que entre que improvisé la subida con la poca información que recordaba de una reseña que había visto por internet, que la ruta elegida era un poco retorcida por que desde Nueno no sube nadie a este pico y que la niebla me impidió orientarme correctamente, por no hablar de la cantidad de nieve que encontré por alli arriba (esto si que me sorprendió, 20-30 cm de nieve recien caida a escasos 1400 metros de altura, en orientación sur y en Guara no es que sea muy normal en un mes de mayo), pues  me tuve que conformar con quedarme a escasos 10 minutos de la cima por que cuando vas en solitario, con una niebla del copón, con zapatillas de correr y unas mallas y estás abriendo huella con la nieve hasta las pantorrillas, hay que plantearse que igual las condiciones de ese día no son las correctas.

 Mis zapatillas de trail a pleno rendimiento por la nieve.


Tampoco pasa nada por que aprovecho para correr por las pistas nevadas de la Sierra de Gratal y completar un pedazo de entrenamiento que me ha dejado una huella en la memoria que me durará unos cuantos días. Nunca había entrenado con tanta nieve y sin duda alguna puedo decir que fue una experiencia única. Eso sí, cuando decidí darme la vuelta, estaba empapado y hacia frio, además estaba entrando el marrón anunciado por los hombres del tiempo, asi que practiqué eso de los descensos a muerte que había estado entrenando estas ultimas semanas, más por necesidad que otra cosa, descendiendo unos 800 metros de desnivel en poco más de 25 minutos, qué gozada descender de esta manera aunque hay que ir con cuidado para no caer y hacerte daño.

 Disfrutando al máximo  por las pistas de la Sierra de Gratal, una estampa muy inusual para ser el mes de mayo.


Como el 2008 fue el año que más y mejor corrí, no puedo evitar comparar el plannig de entrenamiento de estos días con el de ese año. Ese año estaba preparando carreras de asfalto y como plato fuerte estaba la Maratón de Zaragoza que completé en apenas 3h20min, un tiempo muy bueno para una persona que debuta en la mítica distancia. En aquel momento los ritmos de carrera eran tanto o más importante que las distancias recorridas en los entrenamientos.Como estaba completamente adaptado a las largas distancias y daba por hecho que iba a terminar la maratón y las medias maratones en las que participé, preparé a conciencia las carreras para terminarlas en un tiempo determinado. Sí, había que llegar a la meta, pero también había que correr todo lo rápido que se pudiera. 
Este año mi planteamiento es diferente. En el 2008 medía mis entrenamientos en km/min, este año los mido en km/h. He sustituido el asfalto y los recorridos llanos por fuertes desniveles y terrenos muy técnicos. Además, ya no llevo un planning cuidadosamente diseñado como en aquel entonces sino que entreno a mi bola:  salgo cuando quiero, al ritmo que quiero y los días que quiero.Correr rápido ha pasado a un plano secundario, que las salidas que hago ultimamente son lo suficientemente duras como para ir pendiente de los ritmos que marca mi cronómetro.
En definitiva, se trata de disfrutar al máximo en las largas distancias y  de llevar este tipo de entrenamientos a mis salidas habituales por la montaña. La progresión que llevo es muy buena y, aunque estoy en fase de experimentación y adaptación, ya tengo en mente objetivos ambiciosos que me gustaria afrontar en los próximos meses. Veremos si soy capaz de prepararme lo suficiente como para afrontarlos pero si no es así, tampoco pasará nada, bajaré la exigencia y la dificultad de los objetivos y seguiremos disfrutando que es de lo que se trata.

Hay que descender a saco que entra el mal tiempo.






8 comentarios:

DAVID ROZAS GENZOR ... Escritor dijo...

Jodo petaca! Corriendo por la nieve en piratas, ¡qué collons los tuyos! Mira a ver si sonríes un poco en las fotos, que parece que tienes al jabalí rondando todavía por los alrededores...
Un abrazo, mesache!

RUBEN dijo...

¿Será que normalmente, cuando me hago las autofotos, se me están saliendo los pulmones por la boca?.
Saludos mesache,

xabierandueza-berriozar dijo...

Aupa. Vaya crak que estas hecho. Cuando he leido que andas por el Gratal, me ha venido a la memoria que en el año 1965 estando yo haciendo el servicio militar en la capital de Huesca, en unas maniobras militares,le dieron fuego al monte Gratal.Que sigas así que ya vendrá el buen tiempo.
Un saludo.

David dijo...

Lo que nos hace hacer el mal tiempo...

Eduardo Pardo dijo...

Te vas ha poner como un toro, pobre Jabali cuando se encontrará contigo, jaja, saludos

RUBEN dijo...

-Xavier espero que venga el buen tiempo pronto pero tengo unas ganas enormes de hacer cosas.
-David, tu mejor que nadie ya sabes que el monte es una enfermedad, y a estas alturas me parece a mi que ya no tenemos remedio.
-Eduardo, no veas el juego que ha dado la historia del jabalí.....
Saludos a todos.

Ramiro dijo...

Desde desierto de la ribera del Ebro, a las nieves del Prepirineo. No hay jabalí o bisonte que si interponga en tu camino. Como siempre, disfrutando mientras leo tus aventuras :)

RUBEN dijo...

-Ja, ja, ja, saludos Ramiro!!!!!