lunes, 9 de mayo de 2011

CUEVA DEL ACEDERAL

Para nosotros la espeleología es un buen recurso para sábados como el pasado en los que la mala meteorología reinante impedía hacer actividad de cualquier tipo en el exterior. Eso sí, siempre y cuando que la cavidad elegida sea seca y no tenga cursos de agua activos en su interior pero por suerte, en la provincia de Zaragoza tenemos muchas cuevas de este tipo.


Con estas premisas, conducimos el sábado bajo unas amenazantes nubes negras en dirección a Aldehuela de Liestos, en pleno Sistema Ibérico Zaragozano. Esta localidad atesora alguna de las cavidades más interesantes de la provincia de Zaragoza, sobretodo en lo que a espeleotemas se refiere.
Nosotros hemos elegido para empezar la Cueva del Acederal, la más grande y bonita de la zona y también la más dificil. Nos tenemos que equipar y localizar la boca de la cavidad a toda pastilla, por que ha empezado a gotear y la meteo no nos va a dar muchos minutos de tregua.


El porche de entrada es bastante grande y desde aquí podemos elegir los dos ramales a recorrer. Nosotros empezamos por el de la derecha que es el de mayor desarrollo y el que tiene las salas más interesantes. Tras gatear un poco llegamos al primer pozo de -6m, en el que aprovechamos un puente de roca para instalar la cuerda.
Joder con el pasito, el pozo empieza con un agujero bastante angosto en el que cuesta sacar el cuerpo para alcanzar la vertical. Es un paso curioso, nosotros pensábamos que iba a ser la típica vertical con cuerdas y luego resulta que casi, casi es un paso de gatera. Qué risas y resoplidos nos echamos!!!!!!!.


Tras la vertical, una sencilla trepada nos lleva a otra gatera descendente bastante incómoda que nos deposita en la sala principal de la cavidad. Es un sitio muy chulo, bastante concreccionado con estalactictas y banderas aunque también tenemos que decir que nos lo esperábamos un poco más bonito. Aun asi, esta sala es de las más bonitas que hemos visitado en la provincia de Zaragoza.


Tampoco nos entretenemos mucho y, tras remontar el pozo de 6m y volver a resoplar un poco, salimos al porche de entrada para ir a por el otro ramal. En el exterior comprobamos que está cayendo una tormenta elegante, menos mal que aquí dentro estamos a resguardo. Y como está lloviendo mucho en el exterior y no es cuestión de mojarse, aprovechamos para instalar el pozo de -16m del ramal de la izquierda de la cavidad.


La cabecera la instalamos en dos naturales. Desde aquí otra vez un inicio bastante angosto en el que apenas se cabe nos permite llegar al primer fraccionamiento desde el cuál el pozo se ensancha y se convierte en una vertical bastante bonita de descender, e incluso se hace volada a partir del segundo fraccionamiento. La base del pozo es una pequeña galeria con restos abundantes de huesos de animales caidos.
Tras visitar esta sala salimos de nuevo al exterior. Fuera sigue lloviendo con ganas, tanto que nos mojamos un montón en el corto trayecto que tenemos hasta el coche. Inicialmente llevábamos idea de ir a hacer la Cueva del Romeral, pero con lo que llueve y el barrizal que tenemos formado en la pista, decidimos volver a Zaragoza, asi que se queda para otra ocasión.
En líneas generales es una cueva bonita pero que se hace corta. Las principales dificultades las encontraremos en los dos pozos que hay en la parte inicial de los dos rameles que, debido a sus estrecheces, hacen que la cueva sea de progresión incómoda y bastante trabajosa.
Por ultimo, hemos colgado este divertido vídeo en el que nos podéis ver haciendo contorsionismos en los pozos antes señalados.



1 comentario:

David Serrano dijo...

jE JE! Asi que os parecio pequeño el hueco del pozo -6, pues imaginate yo que mido 1,90m!!

Porque habia bajado, que si no al subir, dijo pero si no quepo, claro que al ir solo no te puedes echar las mismas risas!!