TRAVESIA CON RAQUETAS DE NIEVE POR EL COTEFABLO
La cara sur de la Sierra de Tendeñera.
Primer finde de buen tiempo en un mes, había que aprovecharlo, asi que lo he exprimido al máximo. El sábado tocó salir a entrenar y darle duro al Trail Running. Básicamente el entrenamiento consistió en subir cuestas a saco por el Sillón de María, que por cierto fue la primera vez que lo conseguí subir enteramente corriendo, y por el sendero de la cabecera de barrancos de las Planas. Salieron buenas trialeras y un recorrido lo suficientemente duro y exigente como para que me fuera a casa con las piernas al rojo vivo.
El domingo la meteorología sigue estable asi que al Pirineo a disfrutar de la nieve. Con un riesgo de aludes disparado, decidimos ir al Cotefablo, que esta zona es segura para las avalanchas y permite hacer bonitos recorridos con las raquetas. Llegamos los primeros al aparcamiento del túnel del Cotefablo, huyendo del espectáculo dantesto del colapso de tráfico que había en el Valle de Tena, pero en poco rato se llenó de coches. Sin duda alguna, ese día iba a estar concurrida esta zona.
Esta vez optamos por el Toronzué, una cima de unos 2200m que no habíamos subido y que está menos masificada que el cercano Pelopín, principal objetivo de la cantidad de esquiadores y raqueteros que había el domingo por esta zona.
Llegando al collado del Cotefablo con el Toronzué de fondo.
La ruta es compartida con la del Pelopín hasta el collado que está encima del túnel del Cotefablo. La senda por el bosque de este primer tramo estaba muy trillada por el paso de gente pero era algo incómoda ya que mezclaba la huella de los esquís, con la de las raquetas y la de gente que había ido el día anterior a pie. Una vez en el collado, dejamos a nuestra izquierda la ruta del Pelopín y giramos a la derecha para seguir la larga pista forestal que va por la loma cimera, siempre con el Toronzué, lejano desde este punto, como telón de fondo.
Desde el collado se puede ver todo el recorrido que tendremos que hacer por las lomas de la divisoria de aguas de la línea de cumbres del Cotefablo.
Esta zona es ideal para hacer recorridos con raquetas. Además de ser segura con las avalanchas, gran parte del recorrido se hace por una larga pista forestal y el resto consiste en subir y bajar lomas de pendiente moderada pero siempre aptas para ir con las raquetas.
La innivación actual del Pirineo es excepcional.
La ruta va por la línea divisoria de cumbres del Cotefablo y no todos los años tiene la sufiente nieve para recorrerla con raquetas o esquís. Los apenas 2000 metros de altitud, unidos a una orientación sur muy marcada y el hecho de ser una zona muy expuesta al viento por estar en una divisoria de aguas, hace que sea dificil que aquí se acumule la nieve suficiente. Pero este invierno es excepcional y la innivación actual del Pirineo es antológica, vamos que el domingo pasado aquí había un paquetón de nieve.
La larga pista forestal que tendremos que recorrer.
Tras el collado del Cotefablo, hay que seguir por la loma cimera hasta alcanzar una pista forestal de suave pendiente que recorreremos en su totalidad.
En cuanto se acabe la pista, continuaremos por la divisoria de aguas, mediante un constante sube y baja que nos permitirá coronar varias cotas previas a la cima principal. El día estaba muy despejado lo que nos permitió disfrutar de unas vistas excepcionales de la zona del Cotefablo y del Sobrepuerto.
Tras abandonar la pista haremos un constante sube y baja que nos permitirá coronar varias cotas.
Tras alcanzar la ultima cota, por fin llegamos a la ultima pala cimera. Esta ruta tiene cierta longitud y llegar hasta este punto cuesta un rato pero ya solo nos queda un ultimo esfuerzo para coronar su cumbre.
La pala cimera de la cumbre del Toronzué.
La ultima pala es bastante más empinada de lo que parece. Marta me dice que ya ha tenido sufiente y decide quedarse en este punto.Yo continuo un poco más, remonto la pala cimera y por fin alcanzo la cumbre del Toronzué.
Desde la cumbre se puede observar el largo recorrido que hemos realizado.
Aunque largo, llegar aquí tiene su recompensa. Las vistas de la cara sur del Tendeñera son espectáculares. Os puedo asegurar que es un balcón magnífico de una zona de los Pirineos muy poco conocida. Desde aquí arriba, se me iban los ojos hacia el Valle de Soaso (no es el de Ordesa), un valle salvaje y poco frecuentado que permite acceder a la cara sur del Tendeñera. No lo conozco personalmente pero me he quedado con la copla y no creo que tarde mucho en visitarlo.
Cima del Toronzué.
Como os he dicho, el Tendeñera nos mostrará un magnífico escenario de alta montaña invernal:
Pero las vistas son muy extensas, hacia el sur la Sierra de Partacua y la cara norte del Telera con una innivación magnífica.
Y hacia el norte, las murallas del Valle de Ordesa, muy innivadas también:
La vuelta, con todo el sol cayendo a plomo sobre nuestras cabezas, se nos hizo un poco pesada por la larga pista forestal, pero finalmente la ruta nos gustó mucho y nos permitió satisfacer las ánsias de nieve acumuladas durante estas semanas de mal tiempo.
2 comentarios:
Este invierno con tanta nieve y tanto riesgo de aludes, se han puesto de moda estas pequeñas cimas más meridionales y que también permiten descubrir otras zonas y paisajes que quedan normalmente olvidados.
Ya he visto varios reportajes con esquis o raquetas al Toronzue, Erata, Pelopin y Oturia, hay que aprovechar que inviernos como este hay pocos!
Ya queda poco para la carrera, está claro que vas a llegar en buena forma!
Un saludo
Hola Rubén, una zona muy frecuentada en días con riesgo de aludes, como era este fin de semana. Yo esta cima no la conocía, aunque si que he subida varias veces al Peolpín y al Erata, nosotros aprovechamos para irnos a Guara, saludos
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