domingo, 14 de agosto de 2016

EL DESFILADERO DEL CARES.

LA RUTA DEL CARES: UNA SENDA COLGADA ENTRE ASTURIAS Y LEÓN. 


Hemos pasado nuestras vacaciones de verano por Asturias y hemos dedicado varias jornadas montañeras a visitar los Picos de Europa. El año pasado vinimos con el neopreno y  las frontales y los recorrimos a remojo y por su subsuelo, la caliza de Picos de Europa alberga uno de los karts de alta montaña más importantes del mundo y estas montañas están plagadas de cuevas hasta el punto de poder decir que esta zona es un paraiso para la espeleología.
Pero nos dejamos muchos deberes pendientes, e incluso reconozco que nos volvimos sin apenas conocer estas montañas. Este año hemos vuelto de nuevo a Asturias, para conocer los Picos de Europa de una forma más montañera, y visitar estas montañas que tanto nos llamaron la atención el año pasado.


Picos de Europa forma parte de la Cordillera Cantábrica pero estas montañas, que albergan las máximas altitudes de esta cordillera, forman una unidad con una personalidad y unas características propias. Los pateos y las excursiones se pueden realizar en estas montañas de dos maneras diferentes: por un lado está la alta montaña, con su inmenso karts y sus accidentadas cumbres, cuyas verticales paredes, crestas y agujas, vistas desde lejos, ya nos incitan a pensar que subir hasta sus cimas no será nunca una empresa sencilla; y por otro lado, sus gargantas y profundos desfiladeros, que delimitan los tres macizos de Picos de Europa, y que atraviesan de forma espectácular de sur a norte el corazón de estas montañas. Todas estas actividades tienen  un denominador común, estoy hablando de los fuertes desniveles que se salvan casi siempre a cuchillo y de forma salvaje. Aquí la excursión más sencilla brinca casi siempre de los 1.000m d+, sendas aéreas, canales verticales, caminos excavados en la roca y rutas muy incómodas a través del karts que pondrán a prueba nuestras piernas y nuestra forma física.
El año pasado el único pateo que realizamos en Picos de Europa fue a través de uno de estos inmensos desfiladeros. Como se quedó pendiente de reseñar en este blog y como las próximas entradas (espero que lleguen y sobretodo espero tener tiempo para terminarlas) van a ser monográficas de Picos de Europa, quiero empezar actualizando con esta actividad del año pasado.
El desfiladero del Cares es la frontera natural entre el Macizo Central o de los Urrielles, y el Macizo Occidental o del Cornión. Es una profunda garganta que atraviesa de sur a norte el corazón de Picos de Europa a lo pies de sus cumbres más altas y famosas, como el Torre Cerredo o el Naranjo de Bulnes, aunque estas cumbres apenas son visibles desde el fondo del desfiladero, entre otras cosas por que hay más de 2.000m d+ entre sus cimas y el encajonamiento que ha excavado aquí el río Cares. Por suerte, en nuestra excursión para recorrer el desfiladero no hay que salvar tanto desnivel, unos 600m d+, todo un lujo y una excepción para lo que son la mayoria de los recorridos en Picos de Europa.




La ruta del Desfiladero del Cares es todo un clásico en el Parque Nacional de Picos de Europa.Vendría a ser, salvando las diferencias, nuestra excursión por el  Valle de Ordesa y la Cola del Caballo; es decir, una excursión de carácter más bien dominguero y la que accede el turismo de masas, aunque de paseo dominguero nada de nada, entre la ida y la vuelta, nos tocará recorrer 22km, salvo que hagamos la larga combinación de coches o contratemos a precio de oro el servicio de taxis de las empresas de turismo de aventura de la zona.


Poncebos, punto de partida de nuestra excursión.



Como he dicho antes, el Desfiladero del Cares atraviesa de sur a norte los Picos de Europa por lo que es una autopista natural que permite comunicar la vertiente leonesa y la vertiente asturiana de estas montañas. Salvo que hagáis la combinación de coches, es un recorrido lineal, de ida y vuelta, con puntos de partida o llegada en las localidades de Poncebos (Asturias) y Cain (León).



El desfiladero del río Cares, autopista natural que atraviesa el corazón de Picos de Europa comunicando la vertiente leonesa (Cain) y la asturiana (Poncebos).


Impresionante obra de ingeniería que discurre de forma muy accidentada por el fondo del desfiladero.


Nosotros, como estábamos alojados en Asturias, elegimos a Poncebos por razones obvias de proximidad, como punto de partida de la excursión. El pueblo está ubicado en el fondo del desfiladero, asi que mucho sitio no hay para aparcar, lo que nos obligará a madrugar para poder dejar el coche en periodos estivales de máxima afluencia. Tened en cuenta que los problemas para dejar el coche no sólo vienen de la gente que quiere hacer la Ruta de Cares, sino también de la gente que quiere subir a Bulnes por el funicular, cuyo parking se ubica a la salida de Poncebos, cerca de dónde empieza nuestra excursión.

Camino artificial excavado en la roca (en la parte superior izquierda de la fotografía se puede ver el trazado del canal de aguas).


En algunos puntos la senda es muy aérea y está colgada literalmente en el vacío.


Esta ruta es famosa por discurrir por el fondo de uno de los desfiladeros más impresionantes de Picos de Europa através de un camino excavado en la roca de forma espectácular para construir, entre 1917 y 1924, un canal artificial que llevase el agua de Cain a Poncebos para aprovechamiento hidroeléctrico. En la ruta andaremos por la senda que se utilizó para la construcción de este canal, cuyo vaso, y los túneles que atraviesa, lo podremos ver en numerosos puntos de la excursión.


Los Collados, cota máxima de la excursión.



A modo de comparación, y salvando de nuevo las distancias, esta senda excavada en la roca vendría a ser nuestro Congosto de Montrebei o el Chemin de la Mature, pero en este caso, es mucho más espectácular y de dimensiones mucho más notables. Es increible que en aquella época fueran capaces de hacer semejante obra de ingeniería, pero no es la única de Picos de Europa, el aprovechamiento minero e hidroeléctrico nos ha dejado más ejemplos tanto o más espectáculares que éste del Cares. 




Poco más que contar, es la excursión más conocida del Parque Nacional de Picos de Europa por lo que hay mucha información. Al ser un recorrido lineal de ida y vuelta, se hace un poco pesado y monótona la vuelta. Ese día vimos mucha gente, sobretodo en las cercanías de los pueblos de Caín y Poncebos, pero más adelante no percibimos la masificación de la gente. 
El camino excavado en la roca es aéreo en algunos puntos y las vistas desde el fondo de la garganta siempre son impresionantes. Aunque el verdadero valor de esta ruta es increible obra de ingeniería que se hizo en su momento y que nos ha dejado la excursión más famosa de este parque nacional.
No es lo más bonito de Picos de Europa pero como primera aproximación sirve, en mi opinión esta ruta hay que hacerla al menos una vez en la vida.

Cain, ya estamos en la vertiente leonesa de Picos de Europa, ahora "solo" nos queda volver por dónde hemos venido.

2 comentarios:

carmar dijo...

For and back way! Aéreo y bonito recorrido, sobretodo en su parte media, la más alejada de los bulliciosos extremos cuyo retorno, como dices,puede hacerse algo monótono, pero que debe realizarse al menos una vez.
Saludos

Eduardo Pardo dijo...

Hola Ruben.

Yo de momento, solo he llegado hasta Cantabria, tengo pendiente visitar la zona de Asturias, y sin duda el desfiladero del Cares, es una de las rutas obligadas, para cuando vaya.

Estos sitios tan turísticos, y sobre todo tan accesibles, es lo que tienen, que hay mucha gente, pero eso, no es razón para no hacerla. Los que si he realizado son Montrebei y La Mature, ambos espectaculares.